Capítulo 13: Reiner Braun

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Nota: El fanart que utilice como portada del capítulo no me pertenece, credito(s) a su(s) respectivo(s) autor(es).

Nota 2: Este capítulo es largo, casi de 2,000 palabras. Disfrútalo! :)


- ¡Reiner!- exclamé asustada al ver de rodillas al portador del titán acorazado llorando. - ¿Qué pasa?, ¿qué tienes?

- Irene....lo siento....te mentí......te mentí ese día......yo......yo......- sollozaba amargamente el rubio. 

- ¿Mentirme? ¿A qué te refieres?- pregunté mientras yo también me ponía de rodillas para tomarlo de los brazos. - Ven, es mejor que entres.- fue lo único que después pude decir mientras pensaba en las palabras del rubio. 

Ambos nos levantamos poco a poco quedando de pie: Nuevamente confirmé la gran diferencia de altura entre nosotros, donde Reiner medía más de un metro ochenta y yo solamente  alcanzaba el metro con cincuenta y cinco centímetros. El portador del acorazado se limpiaba las lágrimas con el dorso de su muñeca, me rompía el corazón verlo así. 

Me hice a un lado para que Reiner entrara en mi habitación y a los pocos segundos copié su acción cerrando la puerta tras de mi. 

- Puedes sentarte en la cama, te traeré un vaso con agua.- comenté en un tono preocupado pero a la vez decidido. 

Reiner solo asintió con la cabeza mientras yo rápidamente me dirigía al baño, al estar en este tomé con cuidado el vaso que tenía en una pequeña repisa junto con la jarra para servir el agua en el contenedor de vidrio mientras me preguntaba: ¿En qué me habrá mentido Reiner exactamente? 

Reiner's POV   

Estaba confundido y de cierta enojado conmigo mismo: no quería molestar a Irene con mis problemas y ahora estaba aquí, en su cuarto, llorando mientras ella estaba alterada por mi estado. 

<< Eres un gran idiota Reiner >> Recordé la voz de Ymir en mi cabeza, cuanta razón tenía. 

Posteriermente pude ver como Irene salía del baño y tomaba un vaso con agua en su mano derecha mientras se dirigía a mi para después sentarse a mi lado en la cama. 

- Toma, te sentirás mejor.- expresó la castaña mientras me daba el vaso de vidrio. 

Lo tomé con cuidado y le dí un gran sorbo a este para posteriormente dejarlo en el buro de a lado, había dejado de llorar pero me seguía sintiendo igual de miserable que antes. 

- Gracias. 

- De nada.....Reiner, ¿a qué te referías con que me mentiste ese día? ¿Sobre qué? 

- Yo...lo siento, no quise molestarte con mis problemas. Es mejor que me vaya. 

Me levanté decidido a irme y dejar en paz a Irene, pero al momento de hacerlo ella me tomó de la muñeca sorprendiéndome por su tacto, giré mi rostro para ver el suyo el cual estaba preocupado por mi y me miraba con esos bellos ojos café que estaban llenos de vida y luz. 

- Tú y yo sabemos muy bien que te has guardado muchas cosas por mucho tiempo.....no puedes seguir así Reiner.- me dijo en un tono triste y melacólico. 

Nuevamente me fijé en sus ojos: estos se veían más oscuros por la noche, pero al mismo tiempo más encantadores, y a pesar de que estaban decaídos por mi causa estos me transmitieron mucha paz, una paz que quiero vivir por lo que me queda de vida, una paz que me motivó a hablar de mis sentimientos por primera vez, por lo que nuevamente me senté en la cama de Irene quedándome en silencio por un momento. 

Guardiana de mi corazón - Reiner Braun x LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora