𝗦𝗘𝗥 𝗖𝗢𝗠𝗢 𝗧𝗨 | 𝗖𝗵𝗮𝘀𝗲 𝗗𝗮𝘃𝗲𝗻𝗽𝗼𝗿𝘁

43. 𝗦𝗼𝗹𝗼 𝘁𝘂 𝘆...

⚠️ ADVERTENCIA ⚠️

El siguiente capítulo cuenta con contenido adulto explícito +18, los personajes involucrados en éstos actos tienen 18 años.

Si este tipo de contenido no es de tu agrado, te invito a saltarlo y leer el capítulo siguiente. A la audiencia general, se recomienda leer con discreción.

Rosie

Poco después de que había terminado la película, Chase y yo nos quedamos conversando acerca de la teoría de la relatividad, de la cual habíamos platicado un poco el día que se fue misteriosamente de mi casa y de lo increíblemente loco que era el espacio, los planetas y la posibilidad infinita de que en ellos hubiese cosas inimaginables, como en el planeta Miller, por ejemplo.

Nos quedamos un rato más en la sala cuando vimos la hora, pasaban de las doce pm. Chase se puso de pie y se dirigió a la cocina para poder meter los trastes que habíamos utilizado al lavavajillas. Mientras él hacía eso, yo doblé las cobijas que habíamos ocupado y las guardé nuevamente en el closet de donde las había sacado.

- ¿Ya tienes sueño? - escuché que preguntó Chase desde la cocina.

-Mmm, en realidad no- respondí rodeando la barra de la cocina e impulsándome con mis manos sobre ésta para poder sentarme y noté como Chase me había visto de reojo, terminó de acomodar los trastes y se acercó a mí.

- ¿Entonces que quieres hacer? - preguntó al mismo tiempo que rodeaba mi cintura con sus brazos.

-No lo sé- sentí como una pequeña sonrisa se configuraba en mi rostro, no estaba muy segura del por qué... ¿o sí lo estaba?

- ¿Quieres comer algo?

-Un brownie no sería mala idea- Chase se separó de mí y se dirigió al otro lado de la cocina donde se encontraba la caja de brownies, tomó uno y regresó a mí.

-Aquí tienes- dijo sosteniendo el brownie frente a mi boca, indicando que le diera una mordida.

-Gracias, galán- le di una mordida y vi como Chase sólo me observaba mientras comía mi brownie- ¿Qué pasa? - pregunté extrañamente nerviosa.

-En verdad me gustas.

-Y tú a mí, Chase...

-Pero en serio me gustas, demasiado.

- ¡Y tú a mí! - dije tomándolo de las mejillas y depositando un beso en una de ellas- ¿Qué acaso no me crees? – lo cuestioné elevando una ceja.

-Claro que te creo- respondió colocando el brownie sobre una servilleta en la barra y volviendo a abrazarme de la manera en la que lo había hecho un momento antes- Sólo que... aún no creo que esto esté pasando, que me esté pasando a mí.

- ¿Por qué lo dices? - una extraña sensación de tristeza y ternura se hizo presente y no estaba completamente segura del por qué, ¿era acaso por todo lo que me decía Chase?

-Decirlo a estas alturas sonará estúpido, ya que es más que evidente que llevaba mucho tiempo enamorado de ti.

-Ah, ¿sí? - cuestioné elevando una ceja y él sólo negó con la cabeza, soltando una pequeña risa para después dirigir su mirada al suelo- Me gustas, Chase. En serio no te haces una idea de cuanto, y no miento al decirte que quiero estar contigo siempre.

- ¿Siempre? - preguntó asombrado ante lo que había dicho.

-Siempre- respondí pegando mi cuerpo un poco más al suyo- Eres mi persona... - el momento había llegado. Nuestro primer beso estaba a punto de suceder.