Boyfriend

MESERAS

CAPITULO 22

-No te muevas- llevaba depilando piernas toda la mañana, si sigo así voy a poder abrir mi propio salón de depilación masculina.

Pero para ser hombres se quejan mucho, pueden soportar que los agarren como piñatas pero no aguantan una simple tira de cera en su "delicada" piel.

Estoy segura que Baji se detiene a tumbarme los dientes porque soy chica, de todos los ex miembros de la ToMan es el que más se ha quejado hasta ahora.

-Terminé- limpié el resto de la cera de sus piernas -Sigues Kazutora.

Él se sentó en la silla, elevando las piernas hasta la mesa y levantando su falda de colegiala, agarré una abatelenguas nuevo y le comencé a untar la cera en una parte de su muslo.

-Cuenta hasta tres.

Froté un poco sobre la tira de papel y agarré una esquina para quitarla.

-Tres- quité la tira apenas dije el número, Kazutora se llevó las manos cerca de la zona enrojecida y comenzó a soplarle, como si eso fuera a disminuir el dolor.

-¡Hija de per...!- miró de reojo a mi novio, quien esperaba a que terminara de insultarme, para tener una razón válida de golpearlo -¿Qué pasó con el dos y tres?

-No sé contar- seguí con todo el procedimiento, recibiendo una sarta de palabrotas cada vez que le quitaba el bello de sus piernas.

La verdad es que si me divertí depilandolos, esto les servirá de lección cada vez que no alaguen a una chica cuando se ponen bonitas para ellos, no saben todo el trabajo que hay detrás.

Después seguí con el maquillaje, acentuando sus rasgos más bonitos y haciéndoles contour.

Nahoya y Souya nos habían pedido de favor que los ayudaramos en el restaurante, cerca de donde lo tenían iba a ver una convención de cosplay y Chifuyu siendo otaku dijo que se disfrazarían de colegialas.

Lo increíble que todos se comprometieron con el disfraz y más de uno ni si quiera tuvo que utilizar peluca, pero aún así todos seguían pareciendo hombres, aunque si los mirabas de lejos y no se agachaban, por obvias razones, nadie lo notaría.

Yo también ayudaría, incluso me vestí como hombre para encajar con la estética de lugar, pero como Smiley no quería que me cansara me dejó en la caja, solo me dedicaría a cobrar.

Todos se miraban bien, pero mi novio era la más bonita de todos.

-Si alguien se pasa de listo me avisas.

Es un celoso por naturaleza y la verdad es que me gusta que sea así.

-Nadie me va a hacer nada Taka, hoy tu eres la bonita de la relación- lo besé antes de irme a mi puesto de trabajo.

El lugar se fue llenando poco a poco, los chicos iban y venían entre las mesas, entraron todo tipo de clientes, desde personas que venían en cosplay de alguna caricatura hasta algunos que solo pasaron por el lugar y les llamó la atención las meseras.

Incluso hubo un par de depravados que intentaron ver debajo de la falda de los chicos, cuando notaron lo que tenían entre las piernas sus caras fueron un poema.

-Ya me rocé- Takashi fue a dejarme el dinero de la mesa que él había atendido y aprovechó para descansar -¿A ti no te pasa? Usar falda es difícil.

-Suelo ponerme desodorante en los muslos, eso ayuda a que la piel no haga tanga fricción.

-Es más cómodo usar falda que los molestos pantalones- Chifuyu acaba de llegar y parecía muy cómodo con su vestimenta.