el vuelo fue cansado, pero por fin habíamos aterrizado, tanto yo como todo mi equipo, Lara y yo habíamos reservado en un hotel, ya que hasta mañana no están disponibles nuestros apartamentos.
-hace bastante frío-dijo ella, venimos desde madrid allí también hace el mismo frío, incluso a veces más, pero no se por que nos habíamos confiado con la temperatura.
-al menos no llueve, mira el lado positivo- salimos por la puerta de embarque con nuestras maletas, todo lo que nos faltaba de equipaje llegaría en unos días, Lara llamo un taxi alzando el brazo, y las dos nos subimos, ella se sentó donde el copiloto y yo detrás, teníamos un viaje de unos veinte minutos hasta llegar al hotel y sinceramente estaba muerta, llevaba todo el día haciendo maletas y mirando que no se me olvidara nada además de firmando las últimas hojas del contrato, desbloqueé mi teléfono y abrí instagram, y enseguida me apareció aquellas historias, eran de él, estaba claro que no iba a abrirlas, hacia unos meses que lo había dejado con Marcos, y aún así aún dolía cuando me acordaba de él, preferí no bloquearle en su momento y ahora si lo hacía quedaré como una estupida, así que simplemente silencio sus historias y apago el teléfono, se ha instalado un dolor entre mis ojos como siempre que me acuerdo de él, decido despejarme y mirar hacia la ventana, Barcelona es preciosa, me alegro de que mi carrera vaya tan bien ahora, cuando menos me lo espero hemos llegado, pagamos al conductor a medias y nos bajamos del coche, me acerco a la recepción y pido la llave de nuestra habitación.
-¿estás bien? te noto algo rara desde que subimos al coche- pregunta Lara, se de sobra que ella ya sabe lo que me pasa, pero no quiere obligarme a hablar del tema por que sabe que para mi es delicado.
-estoy bien, solamente me ha saltado una historia suya y pues el dolor de cabeza de siempre-respondo sin más, ella contesta echándome su brazo por encima y dándome un pequeño abrazo mientras esperamos al ascensor, la subida es algo incomoda ninguna sabe que hacer cuando este tema sale, y después ninguna sabe tampoco de que más hablar.
cuando entramos la habitación es bastante grande, nada especial, pero espaciosa, dos camas, una mesa de noche y un escritorio la televisión y un baño con bañera, aprovecho que Lara a decidido ducharse mañana por la mañana para darme un baño en mi piso nuevo no hay bañera así que tengo que aprovechar, Lara me da las buenas noches y de acuesta, es de sueño fácil y sabe que cuando salga de ahí ella ya se habrá dormido, lleno la bañera, y me desnudo por completo poco a poco me adentro en el agua y se en ese momento que es lo que necesitaba, dejo de pensar en todo, en los nervios por mañana, en él, en mi, solo está el agua caliente que arropa mi cuerpo y me relaja, me pregunto si los futbolistas serán gilipollas, quiero decir no es por insultarles, pero me pregunto si tendrán la fama muy subida, me agobia un poco tener que trabajar con personas cargantes pero prefiero no pensarlo, sumerjo la cabeza en el agua caliente y dejo que los pensamientos salgan de ella.
Salgo de la bañera como una nueva yo, me acuesto en la cama y doy por hecho que mañana será un gran día, así que cierro los ojos.
A la mañana siguiente Lara me despierta, si no fuera por ella no me habría levantado ya que ayer no puse ningún tipo de alarma, como siempre voy de despiste en despiste, cuando veo la hora son las nueve, tengo menos de una hora para arreglarme, tampoco necesito mucho pero joder, Lara podría haberme levantado antes.
-Lara podrías haberme despertado cuando te despertaste tú-me quejé.
-lo hice pero te diste la vuelta y seguiste durmiendo- me responde riendo, y no me extraña viniendo de mi, así que me visto, opto por algo normalito, vaquero algo ancho, sudadera gris, y mis converse favoritas, maquillo un poco mis ojeras y pestañas, y añado algo de colorete no me maquillo mucho más por que tampoco sé, soy una torpe con el tema del maquillaje, y me miro al espejo, y vuelvo a tener la pelea de siempre, las orejas, este complejo no es mío, es creado, mis orejas nunca fueron un problema para mi hasta que lo fueron para el, decido dejar el pelo suelto, y Lara y yo nos encaminamos hacia lo que va a ser nuestra mañana de presentación, en el equipo somos 5, Lara es técnica, yo soy fotógrafa, Fer y Jorge son editores y Javi también es fotógrafo, nos darán una vuelta por las instalaciones y nos dirán cuáles son nuestros lugares de trabajo, además a javi y a mi nos presentarán a los futbolistas por que son con los que trabajaremos también a partir de ahora.
Entramos a las instalaciones, y nos metieron a todo el equipo en una sala pequeña, vino una chica alta y rubia, Selena, era nuestra guía y pasamos una mañana bastante entretenida viendo las instalaciones, todo iba muy bien, hasta que yo como siempre no me podía aguantar las ganas de ir al baño, pedí indicaciones para llegar, pero no para volver y ahora no sé dónde estoy, esto es grandísimo y yo estoy cada vez más perdida, camino sin rumbo por los pasillos interminables, hace un rato prestaba atención por donde pasaba, pero ahora voy como un zombie, andando sin rumbo esperando que la suerte me acompañe y encontrar una salida, giro una esquina y choco contra un cuerpo, y acto seguido caigo al suelo de golpe, levanto la vista, y veo a un chaval, bien, llevo veinte minutos sin contacto con la humanidad quizás este sepa por dónde se sale, me pongo en pie sin su ayuda por que por lo que veo no es tan educado como para ayudarme a levantarme, es algo más alto que yo, su pelo es castaño tirando a rubio y antes de que siga fijándome en él me percato de la cara de asco que me está poniendo, antes de que yo hablara él se me adelanta.
-¿quien eres, y que haces andando por aquí como si fuera tú casa?-pregunta con la misma cara que he mencionado antes, lo que me faltaba meterme en problemas el primer día.
-soy la nueva fotógrafa de los futbolistas, estaban dándome un tour me indicaron dónde estaba el baño y ya no se volver- expliqué rápidamente, no quería perder mi trabajo, el chico se quedó en silencio, analizandome, y joder que guapo era. Se acercó algo más a mi invadiendo un poco mi espacio personal.
-nombre-dijo en forma de orden, por lo que veía este chaval no era de muchas palabras.
-Lola, y ¿tú eres...?- respondí de manera simpática aunque su cercanía estaba provocando algo e nerviosismo en mi.
-Pablo- respondió, dándome a entender que mi hipótesis de que no era un chico de muchas palabras era cierta.
-Bueno, pues un placer, ¿no te importaría indicarme dónde está la salida? es que llevas el chándal entonces supongo que...- y entonces caí, aquí sólo llevan chándal los futbolistas, genial, no suficiente con perderme tengo un altercado con uno de los futbolistas, joder, joder, joder.
-no te pongas nerviosa, que no muerdo, aún-dijo él, se estaba mofando de la situación por que ahora su cara de antes había desaparecido y la sustituía una sonrisa pícara.
-no estoy nerviosa- dije rápidamente, y se acercó un poco más.
-lo estás- y acortó el espacio entre los dos de nuevo, aún había espacio entre nosotros pero era cada vez menor. -la salida está todo este pasillo hacia delante aunque si quieres encontrar al equipo que están con el nuevo fotógrafo están en el campo, que se va por esas escaleras- y estiró su brazo justo por detrás de mi, al lado de mi oreja. Entonces volvió a dejar un gran espacio entre nosotros y se fue sin volver a decir nada. Joder, ¿que acababa de pasar?.
ESTÁS LEYENDO
BEHIND (Pablo Gavi)
Romanceella cree no poder con todo esto pero el no la dejara escapar