Aún estaba en aquella habitación, Pablo no paraba de mirar su móvil nervioso y aún no habíamos intercambiado ni una palabra.
-¿Pablo? lo siento, lo de ayer fue mi culpa-le dije.
No era completamente mi culpa, pero fui yo quien le besó de aquella manera en la calle.
-No es culpa de ninguno, joder, es culpa de las estupidas maneras para hacer publicidad a un partido, si no hubiera tenido que juntarme con Caroline podría haberte besado donde quisiera y podría haberte llevado a donde quisiera sin ser un "mujeriego"-dijo bastante cabreado.
-¿que te han dicho los managers?-pregunte como miedo.
Lo que dijeran ellos es lo que había, y si decían que yo estaba despedida y que no podía verle, es lo que se hacía.
-Lo están viendo como una buena manera de patrocinar al club, pero yo me quedo con una reputación que tengo que limpiar- dijo agachando la cabeza y rascándose la nuca.
-Pablo, no te han hecho ninguna foto comprometida con Caroline, puedes decir que simplemente era una amiga de Francia, y quien no se lo crea que le den- le contesté mientras me acercaba a abrazarle.
Se abrazó a mi cintura, y sollozó un poco, entonces me di cuenta de que estaba llorando y de que todo esto sí le afectaba en verdad.
-hey, mirame- le dije separando su cabeza de mi vientre.
-que importa lo que piensen Pablo, tú sabes como eres que más da lo que piensen las revistas de corazón-le dije pasando mis manos por su cara, limpiando aquellas pequeñas lagrimas.
-no es justo joder, yo no soy así, cuando empecé a jugar, lo hice por ilusión y por amor a la afición, no para tener que tragarme toda esta mierda-dijo con la voz rota.
susurré un "lo sé" y seguí abrazándole, me puse a pensar, y me di cuenta de que mi vida acaba de cambiar por completo ahora era conocida, posible novia de Gavi futbolista de élite del Barcelona, ya no era Lola, que mal, pensé pero no quería sumar más puntos a la tristeza de Pablo.
-mira el lado bueno cielo, ahora podemos ir a cenar juntos en Paris, total ya no soy anónima, si quieres te invitó yo y te animas un poco-dije rascando su cabeza.
Entonces separó la cabeza de mi vientre y su mirada había cambiado por completo, sus ojos seguían húmedos, pero ahora una sonrisa llena de ilusión surcaba sus facciones.
-¿como me has llamado?-dijo sonriendo ampliamente.
Cielo, le había llamado cielo, aquel mote que solo me salía cuando estaba enamorada de Marco, había salido de manera espontánea y no sabía si me gustaba o me asustaba, lo que si sabía es que me gustaba verle así de feliz de nuevo.
-cielo-dije de manera tímida.
Se levantó de golpe, y me tiro a la cama, comenzó a darme besos por toda la cara, haciéndome reír, este chico me volvía realmente loca.
-normalmente me dices Pablo, que ya es suficiente por que solo mi familia me llama así, pero cielo es no sé cómo es pero- dijo mientras sonreía cada vez más.
Y volvió a besar toda mi cara, pero paró en mis labios y los besó con ternura, con mucho cariño, como si pudiera romperme en cualquier momento.
El día transcurrió con normalidad, tras eso y darle unas explicaciones a mi familia y amigos más cercanos, fui a comer y a mi habitación, tenía que hacer selección de las fotos y mandarlas a edición.
Entonces me llegó un mensaje de Pablo, "espero que tu oferta de la cena siga en pie, te recojo en una hora" me quede embobada mirando al móvil, este chico iba a volverme loca, comencé a pensar en que iba a ponerme cuando se me vino a la cabeza, las cámaras, iban a salir más fotos, ¿perdería mi trabajo?.
ESTÁS LEYENDO
BEHIND (Pablo Gavi)
Romanceella cree no poder con todo esto pero el no la dejara escapar