Es hora de despertar

Capítulo 21

Buenas(:

Aquí tenéis el siguiente capítulo,

espero que os guste!

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- Vamos estúpido marimo, sé que puedes cumplir tu promesa. -Pensó Sanji mientras era guiado al despacho de Ichiji y veía a Zoro alejarse hacia la sala central del castillo del reino.

Al entrar, exploró el lugar, recorriendo su mirada por los muebles, la decoración, el papeleo encima de la mesa, las alfombras caras... Sin dejarse ni un solo rincón. Recordaba haber bajado a aquel lugar alguna vez cuando era pequeño, pero todo había cambiado desde aquel entonces. Aquel despacho, que en su momento perteneció a Judge, siempre había sido una habitación imponente a la que apenas nadie se atrevía a acercarse. Se debía en parte por aquella decoración tan imperial y anticuada, pero ahora, todo era mucho más minimalista y el color negro era el protagonista. Así que se llevó una grata sorpresa al ver que su hermano había dado su propio toque a la habitación.

-¡Tú! Ve a buscar a mis hermanos y diles que vengan a mi despacho ¡INMEDIATAMENTE! -Antes de que el hombre procesara las palabras del príncipe del pelo rojo, éste volvió a gritar. -VENGA IDIOTA ¿ACASO HE IDO A ELEGIR AL SOLDADO MÁS LENTO DE TODO GERMA?

-Oí, imbécil. No hace falta que trates así al pobre chico. -Dijo el rubio al oír la puerta cerrarse.

- ¿Qué has dicho? -La sombra de su mirada hizo que el cocinero se tensara de inmediato. Sin embargo, no iba a dejarse intimidar.

-Lo que has oído. ¿Es que estás sordo? No deberías tratar así a tus empleados o se amotinarán. -Dijo sonriendo con superioridad.

El contrario se acercó apretando los puños. -No eres más que un error que jamás...

-CÁLMATE ICHIJI. No estamos aquí para discutir. -Se interpuso Reiju.

- ¿Ah no? Y visto que eres tan amable a veces... -Habló irónicamente. - ¿Por qué no compartes con nosotros para qué mierdas querías que nos reuniéramos?

-Sanji merece una oportunidad de explicar qué hace aquí. Estoy segura de que no estaría en este reino si hubiera podido evitarlo. -Dedicó una mirada cómplice al mencionado provocando que Ichiji soltara un gran suspiro de agotamiento. Se le estaba acabando la paciencia.

Justo en ese momento la puerta se abrió y dio paso al resto de los jóvenes Vinsmoke.

-L-Lo siento s-señor... Sé que debí llamar, pero no pude, los señores Niji y Yonji apenas me dieron tiempo para...

-No intentes justificarte ante tanto ignorante. Simplemente no lo entenderán. -Sanji habló haciendo que todos en el lugar se quedasen con la boca abierta.

- ¿QUÉ MIERDA ACABAS DE DECIR? - El dueño del despacho hizo una pausa en cada palabra que endureció aún más el ambiente.

- ¿¿¡¡SANJI!!?? -Gritó totalmente sorprendido el peliverde.

En cambio, el peliazul permaneció quieto y en silencio durante unos segundos mientras mantenía una mirada desafiante al cocinero que una vez fue su hermano.

-El hijo pródigo ha vuelto. -Dijo canturreando irónicamente. Sacó un cigarrillo y se lo encendió. Antes de poder dar la primera calada, se vio obligado a arquear su espalda para esquivar una gran patada proveniente de uno de los allí presentes.

-Tú... Maldito bastardo. Nunca has sido bueno para nada y...

-Niji. -El nombrado se sorprendió al oir a Ichiji frenándole. El pelirrojo había pensado mucho en las palabras que su hermana había dicho hace unos minutos. - No es el momento. -Se dirigió al rubio. -Habla. No es que nos importe lo que tengas que decir, pero puede que te dejemos salir de aquí con vida.