Decidí alejarme de todo, para estar con Sam, simplemente quería empacar y salir de Londres lo antes posible, probablemente porque temía que a la mañana siguiente se hubiese marchado de nuevo.
Tras aquella noche llena de eventos perturbadoramente ridículos y amorosos, Sam me dejó en el departamento, mientras íbamos en el auto me explicó que nuestro viaje, sería dentro de 2 días.
Al despertar por la mañana mi cabeza sentía cada mínimo ruido, el cantar de las aves que antes me parecía precioso, ahora se volvía una molestia.
Cuando abrí los ojos, recordé todos los sucesos vividos la noche anterior.
Pasaron por mi cabeza las imágenes de mi vestido, del bar, de mi subiendo al escenario y finalmente salir corriendo de la recepción. Como siempre, eran cosas que sólo Traw Sanders podría hacer.
Pero dejando atrás el horrendo dolor de cabeza me di cuenta de una cosa que me corto el aliento y a la vez me decepcionó un poco, era aquella manía mia de no poder alejarme de la gente que me hacía daño, desde mi madre hasta Sam ¿ Es que ha de ser necesario terminar sollozando entre las sábanas deseando volver el tiempo atrás, para que cambie de actitud?
El sonido de mi celular inundó la habitación y rápidamente lo tomé entre mis manos, "Sam" decía la llamada entrante, deslice mi dedo por la pantalla y contesté.
-¿Cómo despertó la bella ebria durmiente?-empezó a reír entre dientes.
-Sam! podrías por favor no recordarme que ayer destroce públicamente mi reputación. -le pedí, aparentando enfado cuando me sentía feliz de escuchar su voz.
-Este tipo de cosas suceden en la agencia todo el tiempo, para mañana ya nadie se acordará de lo sucedido, además esos idiotas superficiales no son el tipo de personas con las cuales quisiera que entablaras una amistad Traw, eres demasiado buena para ellos.
Suspiré, sonreí.
-Pe...per..pero que dices Sam, no digas ese tipo de cosas me apenan...
-Traw, créeme, me odiarias si no digo éste tipo de cosas ¿cierto? debo ser romántico, he ahí mi encanto. -rió.
-No soy igual al resto, no me derretire por un par de frases bonitas.
-Exactamente es por eso que quiero estar contigo y no con "el resto del mundo" tengo una idea ¿por qué no desayunamos?
-Está bien, tardaré un poco, acabo de levantarme. -le informé, saliendo de la cama.
-Nos vemos en el Hotcking's Grill ¿de acuerdo? hay alguien que quiero que conozcas, antes de ir a París, nos vemos cuídate.
-Nos vemos...
Por mucho tiempo esperé por decir aquella corta e insignificante frase, de seguro se debía a que me fascinaba verlo.
Tenía que arreglar un poco el departamento, pues estaba patas arriba, terminé un poco tarde e iba retrasada al encuentro con Sam, debía darme prisa, pues pronto el autobús pasaría por aquí.
Tome una remera de color blanco, una chaqueta roja, me puse los jeans, cepille un poco mi cabello, tomé mi bolso a toda hostia y salí corriendo con los tenis en la mano.
Al abrir las puertas que daban al aire fresco de la calle, noté que el autobús se aproximaba, me subí a el, todos los pasajeros empezaron a reír a carcajadas ¿Qué estaba pasando? me analicé, para ver que estaba fallando...¡Oh no! me había puesto dos tenis diferentes, uno negro y otro rojo, me senté avergonzada y a la vez tentada a lanzarme por la ventana.
Tras el largo y morficante trayecto llegué al restaurant, entré algo agitada, divise a Sam mirándome, sentado en una mesa amplia, frente a él un hombre que desconocía pues no podía verlo ya que estaba de espaldas.
-Lo siento! voy retrasada-dije, cuando de pronto el hombre misterioso se volteó y era nada menos que André, mi ex novio fotógrafo, mi alma cayó al piso y se manruvo ahí burlándose de mis espantosos zapatos.
André únicamente me sonrió, pero su mirada me decía que también estaba sorprendido.
-Hey Traw, siéntate.-dijo Sam. -¿Oye Traw...tus zapatos..?-echó a reír.
-Estaba apurada ¿de acuerdo? -le aclaré.
-En fin, quería presentarte a André, es mi fotógrafo, y mi mejor amigo.
《¿Mejor amigo?》esto olía, muy, muy mal.
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Reencarnando a mi amor.
RomanceLuego de escapar de un infierno, Traw Sanders decide emprender un viaje incierto hacia Londres para empezar una nueva vida, ella tan sólo quería una vida normal. Pero la normalidad no es algo que la defina. Todo cambia, cuando llega Sam Williams qui...