𝘊𝘢𝘱í𝘵𝘶𝘭𝘰 23: 𝘛𝘰𝘤𝘢𝘳 𝘺 𝘵𝘦𝘮𝘣𝘭𝘢𝘳

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- ¡Estás pisándome!

- ¡¿Yo?! Tienes el pie demasiado pequeño, Mina. Parecen dos tapas de botella.

- Somi no sabe agarrarme bien, esto es una pérdida de tiempo.

- Yo soy el que guía, Lisa, no puedes moverte a tu antojo.

- Christopher, eres malo bailando.

- Eso es porque me toca con una chica con cara y voz de pito, porcelana. sin fastidios.

Sana apretó los labios escuchando las quejas de sus alumnos; ese viernes, los había emparejado para comenzar con una clase de baile pero al parecer no congeniaban con la persona que tenían en frente y debían hacer algunos cambios, el tema era que no sabia cual y de que manera.

Movió la cabeza, los dejaría así, al fin y al cabo recién llevaban cinco minutos tomados de la mano y sin dar un paso correcto de baile. Podían mejorar con el correr de los días.

Antes de caminar otra vez hasta su equipo de música, le dio una rápida mirada a Tzuyu, la morena estaba sentada en un viejo sillón en forma de cubo al lado de Jimin y susurraban cosas solo para ellos. Se preguntó qué, porque Tzuyu apenas entró dijo que ella no bailaría pegada a ninguno de los chicos y por eso prefería darle ideas a Jimin mientras él escribía algo.

Puso la música nuevamente y todo salió igual. Apenas juntaron los cuerpos, comenzaron los pisoteos, los gritos por el trabajo mal hecho y los reproches por culpar al otro en un paso mal dado.

Manteniendo la calma, se acercó al grupo de seis y se detuvo frente a ellos.

- No es muy difícil, solo los chicos guían y las chicas lo siguen. Mina ¿por qué te separas de Jungkook apenas comienza la música?

- ¡Porque vive pisándome! Uno de sus pies es como cuatro de Somi o Christopher. No quiero seguir bailando con él.

- En mi defensa…

- No tienes defensa, Jeon - lo cortó Sana y el chico pateó algo inexistente del suelo- Somi y Lisa ¿cuál es su problema?

- No confió en Somi. No me sostiene bien y parece va a tirarme al suelo. quiero un disco.

- Siempre, nena- murmuró Christopher alzándole las cejas y guiñándole un ojo- Yo también quiero cambiar. Chaeyoung me toca mucho.

- ¡No es cierto!- se defendió Chaeyoung sonrojada porque el chico mentía y solo para molestarla.

- Bueno, bueno…A ver, ven Bang - lo llamó Sana y el chico inmediatamente se puso frente a ella- Guiarás y te seguiré ¿de acuerdo?- el chico asintió al momento que colocaba una mano en la cintura de Sana y el otro brazo loba para unirlo con el de la rubia- Observen… eh, Chou, pon la música- la llamó con diversión para que Tzuyu, además de hacerlo estirar, la observara.

La morena alzó la vista al escuchar su apellido. Entrecerró los ojos, Bang y Sana estaban demasiado pegados que parecían uno solo. Bufo algo por lo bajo y con lentitud hizo lo que la rubia le dijo.

Cuarenta segundos. Cuarenta segundos exactos contó a Tzuyu desde un constado al ver a Sana junto al cuerpo de su mejor amigo. Cuarenta segundos en que no se quitaron la mirada de encima y de vez en cuando Bang le guiñaba un ojo.

Curvó sus labios hacia arriba y se cruzó de brazos, estaban brindando un espectáculo cual pareja enamorada y eso le generaba algo en el interior. Una sensación rara de molestia y nueva que golpeó su pecho.

Cuando Bang giró el cuerpo de la rubia y terminó de pegar la espalda de ella contra su pecho, estiró su brazo y detuvo la música. Todos los pares de ojos fueron a parar a ella.

Lenguaje del Amor || Satzu •Adaptación•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora