Amor Infinito || Drarry

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Cedric posó su mano en la mejilla roja dónde aquella sangre sucia se había atrevido a golpearlo.

-¡Insignificante sangre sucia, pagarás por esto!- Gritó el castaño sacando su varita pero antes de que pudiese hacer nada Ron lanzó un Desmaius dejando a Cedric inconsciente.

-Da gracias que no fue peor- Murmuró Ron refiriéndose a que pudo haberle lanzado algo más fuerte y peligroso. 

Hermione se lanzó a los brazos de su novio sintiendo seguridad, él correspondió con la misma intensidad pues lo era todo para él.

Rato después se apartaron y miraron al chico tirado en el pasillo.

-¿Qué haremos con él?- Preguntó Ron.

-No podemos tomar cartas en el asunto, ya se encargará el ministerio cuando Harry actúe- Dijo ella.

-Tienes razón, entonces vayamos por lo que nos pidió antes de que despierte-

Herm tomó la palabra de su novio y fueron a la habitación de Harry por cosas para él que guardaron en una maleta así como las de James que pusieron en otra, observaron por última vez al castaño y salieron de ahí.

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-Gracias- Dijo Ron bajando del taxi al cabo de entregar el pago.

Hermione le esperaba afuera del hotel dónde Harry junto a James se hospedaban.

-Fue mejor que tomar el auto encantado de papá en segundo año- Dijo riendo.

-Ya lo creo- Ella negó con la cabeza soltando una pequeña risa y ambos se adentraron al hotel.

En la recepción Hermione dijo que traían unas cosas para el huésped Harry Potter, quién por no dejar sólo a su pequeño dio la indicación de que pasaran, fueron hasta el jardín donde James disfrutaba de uno de los columpios para bebés que cubrían todo su cuerpo, era una especie de cubo que tenía dos aberturas para sacar las piernas, parecía que se divertía y eso le hizo a Harry sentirse mejor, sus amigos pudieron notarlo en cuanto estuvieron ahí.

-Harry- Habló Herm.

El nombrado volteó y les sonrió débilmente mientras sus ojos se llenaban de lágrimas, ella se acercó a él y sin poder evitarlo le abrazó mientras lloraba también.

Ron se unió al abrazo y el chico de lentes se recargo en los hombros de sus amigos mientras sollozaba.

Rato después Hermione se apartó para ir directo con James quién aún estaba en el columpio, ella le meció suavemente y el pequeño de ojos miel sonrió divertido.

-Cuanto lo siento amigo- Comenzó Ron.

-No importa...- Dijo encogiéndose de hombros. -Creo que me he desahogado lo suficiente...- Miró hacia el pasto verde que pisaban recordando sus días anteriores. -El primer día lloré cuánto pude, anduve por las calles pensando y sintiéndome miserable, el día siguiente estalle en furia destrozando todo lo de otro cuarto mientras James dormía- Habló en voz baja, arrastrando las palabras.

-¿Y nadie se dio cuenta?-

Él negó.

-Fue sólo un momento, luego con un reparo todo quedó como nuevo y regrese a la habitación antes de que alguien me viera o mi hijo despertará, de todos modos puse un hechizo silenciador y otro para que no abrieran la puerta, cuando me fui los quité- Explicó.

-¿Te imaginas que alguien hubiera entrado y no escuchara nada?, tremendo susto- Dijo y Harry por primera vez se permitió reír.

-Veo que trajeron más de lo que pensé- Harry alzó una ceja mirando las maletas que tenía su amigo.