Amor Infinito || Drarry

Cᥲρίtᥙᥣo 20

Nota: Para este capítulo les recomiendo escuchar la canción que les dejé aquí arriba, fue en la que me inspiré para la creación del fic y que una parte de la letra corona el nombre de la historia así que espero les guste.

Dejé una pequeña parte de la canción que ya verán.

Canción: Te daría todo - Dulce María.

Si lo prefieren la puede escuchar en su plataforma favorita <3

Gracias y disfruten su lectura <3

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Su cuerpo no se movió ni un milímetro, sus labios entre abiertos lograron que Harry tuviera acceso a su boca, se dio cuenta de la rigidez en el cuerpo de Draco, temía su reacción al apartarse pero ya no era tiempo de pensar en eso.

Harry mordió suavemente su labio inferior, mientras que Draco se hacía a la idea de lo que pasaba frente a sus ojos, porque si, veía perfectamente lo que sucedía, Harry tenía los párpados cerrados, casi podía sentir el metal de sus gafas sujetas en el puente de la nariz rozar con su piel. Y su aroma impregnaba sus fosas nasales, era delicioso, como una mezcla de tierra mojada, madera recién pulida y un toque de lavanda.

No estaba seguro de alejarse, algo dentro le gritaba que se lanzara a sus brazos pero su parte racional no estaba en sintonía con el corazón, Harry seguía intentando hacerse paso en sus labios, ya se había vuelto adicto al sabor y no pensaba dejarlo.

Draco al fin cerró los ojos y lentamente comenzó a corresponder, el más bajo sonrió internamente al sentir por completo aquella boca. Comenzó un duelo de lenguas que intentaban dominar, terminó siendo el rubio quien mandara en el beso, y Harry se dejó pegar contra la pared, sin dejar de besarse Draco colocó sus manos en la cintura del azabache mientras que él lo rodeó por el cuello.

Era un beso pasional, sus labios encajaban perfectamente, sentían una ola de emociones recorrer su cuerpo, era excitante. No supieron con precisión en qué momento aquello subió de tono hasta que se apartaron para tomar aire y Draco en vez de volver a sus labios continuó el labor en su cuello. Harry comenzó a gemir al sentir los besos húmedos de Draco, hundió sus dedos en su cabello y cerró los ojos.

Hacía mucho no era tocado de esa forma y quizá nunca lo sería, porque no veía a nadie más a su lado que no fuera Draco.

"Y cuando ganan mis latidos... Este amor infinito me inunda de ti..."

Volvieron a los besos, está vez más calmados sin dejar de ser profundos, la necesidad de tenerse no se podía explicar, sólo sentir.

Todo era perfecto hasta que...

Un llanto los interrumpió cuando el rubio posó sus blanquecinas y delgadas manos por la piel de Harry, había subido un poco la camiseta mientras le besaba ferozmente.

Draco estaba completamente sonrojado y con el cabello revuelto, seguramente el ruido fuera de la habitación había despertado al bebé. Harry no lucía muy diferente, su rostro completamente rojo, la respiración agitada y los labios hinchados eran clara muestra de excitación.
Sus ojos se encontraron cuando se apartaron, las puntas de sus narices rozaban, tratando de normalizar la respiración, ninguno se soltaba todavía hasta que el llanto fue más fuerte que el anterior.

Rápidamente Draco se apartó de Harry quién lo único que pensó fue en su hijo, lo vio meterse al cuarto tan rápido cómo sus pies lo permitieron mientras que él se debatía en entrar, optó por no hacerlo, necesitaba calmarse y asimilar lo que acababa de pasar. A paso lento se dirijo a la escalera tratando de no hacer ruido y evitar ser detenido por él, quería ver a James pero lo mejor era irse, ya había tenido suficiente.