Escribe sobre mí

XI: El tiempo

Logré tranquilizarme a los diez días de la noticia. Y aunque el corazón se me estrujase al pensar en lo que había pasado, Leila era mi amiga y quería estar para ella. Nunca había sido el tipo de chica que dejaba que una pareja interfiriera en la amistad. Y esta vez no iba a ser la excepción. Las cosas entre Sterling y yo eran...complicadas, por decirlo de alguna manera. No quería hablar con ella, pero tampoco quería que pensara que todo por lo que pasamos se iba al caño por esto. Era una persona leal y estaría allí para ella siempre que me necesitara. Pero estaba tratando de recuperar mi corazón y necesitaba un poco de distancia para poder lograrlo. Había tratado de hablar conmigo varias veces y aunque lo intentara, no lograba mantener la conversación viva. No quería que esto fuera el fin de nosotras. O de nuestra amistad. O de lo que sea

Habían pasado muchas cosas en tan poco tiempo que todavía me daba vueltas la cabeza. Sterling había descubierto mis historias y no me lo dijo. Y aunque no me molestó, si me sentía un poco invadida. Algo en todo esto me olía muy mal y no sabía muy bien qué. Mis amigas trataron de mantenerme entretenida los días siguientes al gran debacle y agradecía que me quisieran tanto. Estaba tan rodeada de amor y de magia que me era difícil no considerarme la más afortunada del planeta.

Festejamos el cumpleaños de Leila y Alex estuvo a mi lado como el sol que era, haciéndome reír siempre. Alex me hacía sentir como si el peso de mi pecho fuera un poquito menor y agradecía al cielo tenerla en mi vida. Fuimos por algo de comer en el McDonald's y luego a por helado. Fue lindo ver a Leila y sus amigas. Leila estaba feliz y me hacía muy feliz compartir su felicidad. En medio del caos, Vienna cumplió 15 años pero Sloane brillaba por su ausencia luego de todo el desastre entre ellas hacía un tiempo.

Había visto a Sterling brevemente y odié como mi estomago revoloteó al verla. Pero iba a ser una larga recuperación hasta que mi corazón pudiera entender que Sterling no era buena para mí. Habían sido años de esperar que ella me quisiera y no sería fácil ni rápidp. Por el momento, no ha habido avances en esa área. Estaba decepcionada, pero la seguía queriendo.

Vay y yo decidimos ir a un concierto. Porque en la mayoría de mis recuerdos, incluso en los más bizarros, era Vay la que estaba a mi lado alentando cada una de mis locuras. O me arrastraba a lugares de mala muerte de los cuales por gracia del señor salíamos vivas. Así que, con mi mejor sonrisa y lista para pasarla bien, nos dirigimos hacia el lugar. Lana tomaba mi mano mientras corría hacia la entrada. Sterling venía cruzando la calle, seguida de Leila. Volteé a ver a Vay y Sloane que caminaban detrás de mí. Vay compuso una mueca y Sloane mantuvo una expresión impasible todo el rato.

—Oh, tú eres Sterling. —Lana exclama cuando llega a la esquina y reconoce a la pequeña rubia. Su mirada se desvía a mí por un segundo y vuelve a Lana para dedicarle una sonrisa.

—Tu debes ser Lana.

El lugar estaba repleto de gente, tanto que apenas se podía respirar. No me gustaban las multitudes, como ya era sabido. Un montón de muchachas de mi instituto rondaban el lugar y un montón de viejos lanzaban miraditas en nuestra dirección, lo cual era asqueroso. Éramos todas menores. April se sumó a nosotras en algún punto y le sonreí.

—Todo esto me parece muy surreal. —Alex dice, poniendo su brazo alrededor de mis hombros. Ambas mirábamos a Sterling y Leila unos metros más adelante. Sonreí de labios sellados y me aferré a Alex. —¿Cómo estás?

—Bien, no es el fin del mundo.

Y en ese momento empezaba a creerlo.

El concierto estuvo genial. Canté a los gritos todas las canciones, con Alex a mi lado y por casi dos horas olvidé que Sterling estaba en el mismo habitáculo. Sterling estuvo un rato con nosotras y me obligó a que nos tomásemos una foto juntas y yo accedí. Todo parecía estar tranquilo, disfrutaba de mis amigas y de la música sin preocuparme por mucho más. Pero todo eso cambió cuando April apareció llorando, diciendo que había besado a Sterling y ahora había drama.