Limerencia [Libro 2]

Capítulo 20

AVISO: las cosas subrayadas son tachadas, Wattpad no me permite esa función.

Liam

Lanzo otro golpe más a la bolsa dando por finalizado el entrenamiento de hoy. He estado tanto tiempo dando golpes que debo dar asco de lo sudado que estoy. Hay días en los que necesito desaparecer. Pegarle a la bolsa más de lo que ya lo hago. 

Hay algo dentro de mí que no se siente bien desde hace tiempo.

Terminé la clase de la tarde y ya voy camino a casa otra vez. Y ya no hablo de la casa donde crecí, de la casa que tenía enfrente a cierta vecina interesante a la que me gustaba molestar y sacar de quicio con el solo objetivo de que me preste un poco de atención. Hablo en realidad desde muy lejos de esa casa. 

En otro estado. 

Tal vez, sea por el nuevo trabajo que desde hace un par de días estoy muy inquieto. John me ha enseñado todo lo que sabe sobre representar personas y he representado a varios chicos que han ganado el campeonato de boxeo durante los últimos meses. Y también he hecho otro tipo de representaciones, no necesariamente relacionadas con el boxeo. 

El campeonato en el cual yo salí en primer puesto pasó ya hace un año y unos dos meses. Lo cual me permitió no tener que volver a casa y mantenerme alejado. Ahora con las clases que doy en este gimnasio como entrenador y las representaciones, puedo mantener mi departamento y mi moto. Pero he tirado mi curriculum en varios lugares y uno picó. 

Mañana comenzaré a trabajar como representante de una escritora juvenil. ¿Irónico, no? En fin, no me dijeron de quién se trata pero la verdad es que no me interesa mucho. Lo único que espero es que nos llevemos bien. Estuve investigando bastante todo lo relacionado con el mundo de las editoriales y la literatura juvenil desde que me dieron el trabajo. Hasta terminé leyendo y todo. 

Estoy algo nervioso, debo admitirlo. Pero nada que no se pueda solucionar. 

Llegué al departamento y fui a ducharme. Todos mis músculos gritan de dolor, debería haber estirado antes de cerrar el gimnasio. Eché la cabeza hacia atrás dejando que el agua caliente me golpee en la contractura del cuello. 

Joder, todo mi cuerpo está demasiado tenso. 

Necesito relajarme. Hace tiempo que no logro respirar correctamente. La culpabilidad es una semilla que echó raíces dentro de mí. 

¿Qué estarás haciendo en este segundo, mi pequeña?

Niego con la cabeza cuando aparece ella en mi mente. Ella ya no forma parte de mi vida, yo no formo parte de la suya. 

Pero siempre formará parte de mí. 

Está tatuada en mí, en las partes más importantes de mi vida y mi corazón guarda su lugar con un candado que nadie más podrá ocupar.

Salgo de la ducha y me tiro a la cama así como estoy. Ni siquiera tengo ánimos de cocinar.

Mañana será un nuevo día. 

Avery

Espero que mi representante no sea un idiota. 

Que sea competente es lo único que espero. 

Entro por las gigantescas puertas de vidrio de la editorial haciendo que mis tacones resuenen en el suelo de mármol. La secretaria a quien le tembló la voz al atenderme me indicó ir hasta el piso trece a la oficina número cuatro. Subo por el elevador jugueteando con mi colgante entre mis dedos.