Objetivo diez

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Narra Kyoya Hibari

Tome entre mis brazos al omnívoro para que no tocara el piso. Mientras lo sostenía miraba con odio a ese imbécil.

Lo había arruinado, él no debía estar manchado de esta mierda.

Coloque mi mano en su frente para que nublara sus recuerdos de su mente, pero un disparo detuvo mi acción.

Lo protegí en caso de que fuera el enemigo, para mi suerte o desgracia se había dignado a aparecer el maldito carnívoro.


—ni lo pienses Hibari, él debe saber la verdad.


—no, él estaba bien aquí hasta que tú apareciste.


Quería golpearlo, pero no podía dejarlo solo.

Lo aferre a mi para que no me lo arrebataran. Sabía que me estaba viendo patético, pero esos dos eran una amenaza.


—el momento ha llegado y los sabes Hibari. No estará solo, esta sus guardianes en especial tú que eres su protector desde las sombras.


—deja que haga su berrinche.


Fulmine con la mirada a ese estúpido herbívoro que se cree carnívoro.


—no me veas así Alondra kun, en lugar de discutir deberíamos atender a los otros.


—no me importan ellos.


—pero a él sí, ahora vamos, seguramente ellos ya llegaron.


A pesar de que no tenía tantas fuerzas cargue al omnívoro.

Al llegar me encuentro a los otros Arcobaleno que curaban las heridas del resto.

El imbécil de Mokuro dejo al herbívoro menor en una de las casillas.


—ya vuelvo iré por mis subordinados.


Por fin se fue. Deje en una camilla a Tsuna.

Acaricie sus mechones castaños ignorando que Reborn estaba atento a mis movimientos.


—le prometí a mi madre que él no sabría nada, Kuro acordó que Tsuna no debía saber sobre Vongola, él estaría a mi lado liderando Kuro.


—sabes que al final tu padre dejo como heredero a tu hermano por que sabía que Tsuna debía tomar su lugar.


—pero si vuelve sucederá lo del pasado.


—no pasará, nosotros los Arcobaleno estamos para evitarlo.


Como deteste la decisión de mi padre. Antes de morir declaro que el herbívoro de mi hermano sería el jefe de Kuro y yo el guardián de la nube de Vongola.

En eso veo a mi tío Fon, quise patearlo y golpearlo, pero con esa apariencia infantil solo me acarrearía problemas.

Deje a Hibrid con Tsuna en lo que curaba mis heridas.

El herederoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora