El heredero

Objetivo catorce

Narra Tsunayoshi Sawada

A pesar de no saber mucho sobre en lo que me implicaría había accedió a tomar el liderazgo de una mafia.

No comprendía porque accedí, pero en aquel momento mi intuición me decía que debía aceptar aquel rol que se me impuso desde el momento en que nací, aunque yo ni siquiera recordaba nada de lo sucedido en el pasado.

Al regresar a mi casa vi en el buzón una carta, algo inusual ya que ahora todo mundo podía mandarte un mensaje a in dispositivo móvil.

Tome la carta, para mi sorpresa era dirigida a mi. En ese momento la abrí.

Abrí los ojos debido a la sorpresa. Hace años no tenía contacto con Emma.

Lo recordaba como uno de mis pocos amigos por no decir el único que tuve en mi infancia, pero tras un accidente se mudo con su abuelo.

La imagen de Emma en un charco de sangre apareció en mi mente.

¿Qué había sido eso?

Abrí el sobre y comencé a leer su contenido.

En la carta me saludaba y me preguntaba como estaba, él me afirmaba que al estado bien viviendo junto a sus padre y que en su nuevo hogar hizo amigos. Que, si disculpaba por no contactar conmigo estos años, pero tenía miedo de que yo estuviera molesto con él. Me alegre leer que pronto vendría a Namichu para estudiar en la misma escuela que yo.

Al terminar de leer la carta me apresure a dirigirme a mi habitación y responderle.

Al llegar tome un pedazo de papel y un bolígrafo para comenzar a escribir.

Le conté sobre mis nuevos amigos que hice. Me hubiera encantado contarle sobre Reborn y Vongola, pero no quería implicar a más gente en esto. Yamamoto, Gokudera, Hibari san, los gemelos y Lambo ya estaban metido en esto desde antes de que nacieran, así que ellos sabían manejar esto mejor que yo.

Le conté que comencé a asistir al club de cocina donde Kyoko san me invito. En mi niñez me gustaba ella. Pero con el paso del tiempo me di cuenta sobre que mis sentimientos hacía ella eran más de admiración que de amor.

La imagen de Hibari san aprecio en mi mente.

No eso no es posible, ambos somos chicos además de que él no se fijaría en alguien tan dame como yo.

—te ame en nuestra anterior vida y en esta, no importa que no lo recuerdes yo te seguiré amando.

¿qué había sido eso?

Dudo que él diga algo tan romántico.

Me sonroje al traer a mi memoria lo sucedido antes de llegar a mi casa.

Estaba siendo molestado por unos chicos, a pesar de que estaba aprendiendo a defenderme no quería usar lo adquirido. Por suerte llego Hibari san y me salvo, como agradecimiento le di un muffin, espero que le haya gustado.

Cierto se me olvidaba traía muffins en mi mochila, los saque y fui en búsqueda de Lambo.

Mamá había salido a trabajar, así que solo estábamos solo nosotros dos.

Llame a su puerta, inmediatamente fue abierta.

—¿qué hacen todos aquí?

Gokudera y Yamamoto estaban en la habitación de Lambo.

—¡décimo! Lo estábamos esperando.

—hola Tsuna, una disculpa por venir de imprevisto.

—no te preocupes Yamamoto, me alegro que estén aquí, así puedo compartir esto.