Arrangements

Capítulo 67

Una semana después de que terminara el celo de Jungkook, Namjoon se sentó en la mesa del comedor mientras la doctora Lee le quitaba los puntos. Estaba contento de haberse librado por fin de la sensación de tirantez en la espalda. Todavía le dolía, pero se estaba curando bien. Al menos, sin los puntos, podría pasar más tiempo con Jin, salir con Hoseok y, por fin, encontrar algo que hacer con Taehyung. El Omega había estado especialmente pegajoso la última semana. Eso no era sorprendente teniendo en cuenta que Jungkook y Jimin habían seguido adelante con sus intenciones de apareamiento, y ahora estaban escondidos en el nido de Jungkook sin intención de salir pronto.

Se puso una camiseta nueva mientras Jin se despedía de la Doctora. A través de la ventana, podía ver la lluvia rebotando en el suelo. La casa había estado tranquila desde el celo de Jungkook, y todos pasaban el tiempo solos o con sus respectivas parejas; Yoongi estaba recuperando el tiempo perdido con Hoseok, así que Namjoon dividía su atención entre Jin y Taehyung.

—¿Ya estás mejor, cariño?— preguntó Jin mientras lo rodeaba con sus brazos por detrás y le daba un beso en la mejilla.

Namjoon asintió. —Ya no aprieta tanto. Siento que puedo moverme.

—Hablando de eso—, Jin bajó la voz. —Tengo una propuesta.

—¿Una propuesta?— Sonrió al Alfa.

Jin suspiró y se sentó en una silla a su lado. —Mi celo está en camino. Puedo sentirlo.

—Creía que nos íbamos de vacaciones.

—Sí—, sonrió Jin. —En cuanto termine mi celo, nos vamos de aquí. Pero me gustaría saber tu opinión sobre cómo vamos a hacer todo con mi celo.

Namjoon lo miró fijamente: no tenía ni idea de qué estaba hablando su compañero. —¿Qué quieres decir?

—Quiero decir—, Jin empezaba a sonrojarse. —Que no hemos hecho mucho... no ha sido tu preferencia hasta ahora, para... Lo siento, no sé por qué me resulta difícil...

—Quieres decir que no he tocado fondo.

Jin asintió. —Sí. Eso.

—No me da miedo ni nada de eso—, Namjoon podía sentir cómo sus propias mejillas se calentaban ahora. —Sólo me falta experiencia.

—Ok, entonces, estaba pensando que podríamos intentarlo en algún momento pronto. Antes de que mi celo llegue.

Namjoon sonrió. —Claro, pero sólo si eres suave conmigo. Espero que me trates como a una virgen.

Jin resopló. —Vale, princesa, seré amable.

—Bien. Mucho lubricante, Jin, ni siquiera estoy bromeando.

—Claro que tendré lubricante—, el alfa mayor puso los ojos en blanco. —Hay lubricante en casi todas las habitaciones de esta casa. Pero de todos modos, iba a sugerir, si no te importa, podríamos pedirle a Taehyung que pase mi celo con nosotros. Obviamente no podemos pedírselo a Jungkook.

—Cariño,— Namjoon tomó la cara de Jin entre sus manos. —Te quiero. Es tu celo, no el mío, si quieres que Tae esté allí me parece bien. Además, es poco probable que pueda tomar tu nudo más de una o dos veces. Quiero ser optimista, pero seamos sinceros.

La cara de Jin se había puesto más roja de lo que Namjoon la había visto nunca. —Mi nudo no es tan... quiero decir... no es enorme.

—Sí que lo es—, se rió Namjoon. —Lo he visto. Creo que es más grande que el mío.

—¿Estamos hablando del nudo de Jin-hyung?— preguntó Yoongi al entrar en la cocina.

Namjoon se giró. —¡Sí! Es enorme, ¿verdad?.