El día en el que Alois volvió a visitar a los aldeanos fué genuinamente alegre, todos habían empezado a planear y contar lo que llevarían a la cena de navidad.
Ciel había estado pensando mucho ese día, seguía sin creer que quizás muy en el fondo un príncipe rubio y más bajo que el, le había hecho despertar sentimientos que no conocía.Es curioso como tenían
muchas cosas en común.(...)
Dos días después ya todos habían terminado de adornar el pueblo con temática navideña, debido a que se desconocía si habría festejo, hasta el día que Alois volvió, no hubo oportunidad de hacer el enorme árbol navideño que había en el centro del lugar, pero lo compensarían haciendo uno pequeño.
Era temprano, todos a esas horas estaban terminando de preparar las cenas en casa, por lo que las calles estaban prácticamente vacías.
Sin duda, la oportunidad perfecta para que alguien cometiera un asesinato.
Ahí estaba él, había escapado del castillo y ahora observaba a aquella chica llamada Elizabeth conversando con la hija del médico, Sullivan.
Creía que era estúpido ese tipo de obsesión por alguien que conoció hace poco, pero la incertidumbre lo estaba matando.
No estaba seguro de si estaba en sus cinco sentidos o no, preguntar lo que preguntaría en el modo y en el día que lo haría eran algo cuestionables, pero ya no se echaría para atrás.Se ocultó detrás de un árbol, vió como la de cabellos marrones se marchaba con sus muletas, pues a veces las requería para moverse mejor, desde el día del incidente de Lizzy se habían vuelto cercanas.
Tan pronto Sieglinde dejó de verse y Elizabeth comenzó a caminar entre los árboles Alois la sujetó con fuerza del cuello amenazándola con un una navaja.-¿Quién demonios eres?- El rubio se sorprendió por la voz siniestra que había salido de la chica de aspecto delicado.
No era tonto, llevaba ropa de campesino y una capucha que tapaba su cara, claro que nadie sabría quien era.
-¿Qué relación tienes con Ciel Phantomhive?-No me hagas daño.- La chica soltó un codazo que hizo que el atacante se debilitara, más no la soltó.
-¡Responde!-Soy su prima. Vivimos juntos en el reino vecino, casi somos hermanos.- Se notaba miedo en su hablar, el príncipe la derribó y salió corriendo, dejando a una Lizzy paranoica y confundida.
No quería hacerle daño, no parecía mala persona, así que al recibir respuesta decidió dejarla con vida, tampoco era un asesino.(...)
La noche ya estaba cayendo, en la gran plaza del pueblo yacía una larga mesa, (en realidad eran muchas mesas juntas.)Había un montón de comida en esta, desde algún tipo de pavo hasta la pasta más sencilla.
Todos estaban arreglados de una forma algo formal sin exagerar, Ciel, Elizabeth y Sebastián tuvieron que volver hasta su casa a buscar un atuendo decente, pero ya estaban de vuelta.Las trompetas resonaron por el lugar anunciando la llegada de la familia real, Leonor y Alois.
Este último más entusiasmado por la festividad, le gustaba estar al aire libre rodeado de gente.-Por satán...- Exclamó el rubio viendo la vestimenta de su peliazul.
-Su alteza, usted tampoco luce nada mal.- Respondió serio, pero con galantería, al notarlo.
-Sí, como sea... ¿Le haz escrito carta a santa?

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Haunted
FanfictionAlois Trancy es el príncipe de un reino que no quiso gobernar, la soledad y emociones que nunca supo comprender lo consumen, lo hacen sentir en el infierno. Ciel Phantomhive es un chico humilde y amargado del reino vecino que termina coincidiendo co...