𝗜 | en dónde aeri y arisu
llegan a un nuevo
mundo en el cual
arisu se siente
sumamente asustado
y perdido, y aeri como
si hubiera encontrado
su lugar al fin.
━ sigamos las luce...
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[DIFICULTAD] ocho de trébol.
[JUEGO] invasión.
[NÚMERO DE JUGADORES] veinte jugadores.
[REGLAS] se deben formar dos equipos de diez personas en donde a cada equipo se le dará un rol, invasores o invadidos. habrán diferentes obstáculos para ambos equipos y los dos equipos dispondrán de armas que eliminarán tanto a los obstáculos como a los miembros del equipo contrario.
[CONDICIÓN PARA GANAR] todos los miembros del equipo invasor deben llegar a la base que los invadidos deben proteger. tanto los invasores como los invadidos deben eliminar atodo el equipo contrario para poder ganar, de lo contrario, aunque lleguen a la base de los invadidos, estarán eliminados. los ivandidos no pueden quedarse en la base durante el juego. si alguien elimina a otro de su mismo equipo quedará eliminado automáticamente.
[TIEMPO LÍMITE] 2 horas.
aeri tuvo que leer las instrucciones tres veces antes de les indicaran formar equipos.
seguía aturdida por la extraña dinámica que debía seguir, ¿qué significaba perder? ¿que ganaba cuando acabara el juego? ¿esas personas se conocían entre sí?
no entendía nada, por lo que mientras algunos se agrupaban para decidir equipos, ella decidió simplemente irse, ya llegaría algún otro idiota que completara el número de participantes requeridos.
— ¡hey! —escuchó que alguien la llamaba.
aeri volteó y vio a un chico un poco mayor que ella dirigirse en su dirección.
— no puedes salir, tienes que jugar. —le dijo el chico tirando de su brazo para alejarla de la salida.
— ¿de que hablas? no entiendo lo que pasa y tengo que encontrar a mis amigos. —se soltó aeri del agarre.
el chico tomó uno de los brazaletes de la pelinegra y lo lanzó por la puerta, logrando que este se desintegrara al pasar por unos lasers rojos que atravesaban la entrada.
— ya entraste, no puedes salir hasta ganar.
aeri miró con terror los restos de su brazalete y volteó a ver al chico que le había advertido.
