19. No nos medimos esta vez

24 1 0
                                    

-DOS DÍAS DESPUÉS-

-¿En serio crees que sea buena idea?-pregunté un poco nerviosa.

-Tranquila mi amor. -tomó mi mano con su mano libre- Ya verás que les vas a caer muy bien a ambos.

-¿Y si me odian? Mejor no hay que ir... 

-Amor, ya les dije que íbamos en camino. Ya falta poco para llegar... -no le contesté- Relájate, todo saldrá bien.- me dio una sonrisa que me hizo sentir más tranquila.

Cuando Tae me dijo que sus padres querían conocerme, mi alma salió de mi cuerpo. Jamás me sentí tan asustada al rechazo como ahora, se que es tonto pero de verdad quiero agradarles. Según me platicó Tae; sus padres son las personas más amorosas y juguetonas con él y tengo miedo de que precisamente por eso, yo no llene el estándar para ser su novia.

-Bienvenida a casa de mis padres- dijo sonriente deteniendo el auto frente a un hermoso jardín muy bien cuidado, lleno de flores de distintos tipos y colores. -Vamos.- bajó y rodeó el auto para llegar a mi puerta mientras que yo estaba en un pequeño trance que terminó cuando abrió esta.

-Tae... ya no quiero entrar.-

-Amor, ya estamos aquí. Te prometo que todo saldrá bien.- dejó un beso en mi frente para tomar mi mano y salir por completo del auto.

-De acuerdo... aquí vamos.- tomé aire y tomé del asiento trasero la canasta de frutas que compré para no llegar con las manos vacías. Tae bajó la otra bolsa de carne y después de cerrar la puerta del auto, se puso a un costado de mi para empezar a caminar hacia la puerta de madera de la entrada. Tocó el timbre y esperamos por unos segundos hasta que se escucharon los ruidos del pasador.

-¡Hola mamá!- 

-¡Mi bebé!- gritó de vuelta una señora no tan grande, al abrir por completo la puerta.

-¡Hijo!- saludó sonriendo ahora un señor. Era obvio quienes eran.

-Los extrañé mucho.

-Nosotros también te echamos de menos.

-Dónde está tu novia, ya queremos verla.- yo me hice para atrás de Tae.

-Aquí está...- se hizo a un lado dejándome a la vista - Mamá, papá... ella es Elizabeth Álvarez, mi novia.

-H-hola, mucho gusto... es un placer conocerlos. Les traje una canasta con fruta, espero que sea de su agrado...- en cuanto terminé de hablar vi como las enormes sonrisas que tenían se borraron.

-Oh.. TaeHyung...- habló su papá luego de unos segundos.

-¿En serio ella es tu novia?- continuó su madre.

-Si.. ¿porqué me ven así?

-Hijo no nos avisaste que no era coreana..- los dos miraron a Tae y luego a mí con cara de desaprobación.

-¿Qué?- les contestó él.

En cuanto su madre dijo eso mis lágrimas se juntaron en mis ojos y sin verlos salí corriendo hasta el auto.

-¡Lizi espera!- lo sentí corriendo tras de mi. No pude contenerme ; una vez que entré en el auto, me solté a llorar. -Amor...-

-Lo sabía. Te dije que no les iba a agradar- seguí llorando sentada en el asiento del auto con ambas manos cubriendo mi rostro.

-Hijo, ¿ella está bien?- preguntó el señor Kim cuando llegaron hasta nosotros.

-Creo que no nos medimos esta vez... linda, sal de ahí ¿quieres?- dijo su mamá con voz suave, salí del auto limpiando mis lágrimas.

Cafecito sin CaféDonde viven las historias. Descúbrelo ahora