𝙗𝙧𝙤𝙠𝙚𝙣 [ 𝙩𝙖𝙚𝙠𝙤𝙤𝙠 ]

c a p í t u l o 7

Su sexto sentido, le hacía creer que el día de hoy sería un muy buen día. Su superior, había sido llamado desde muy temprano a la habitación especial; así que, él se haría cargo de tomar la temperatura de los pacientes. Tenía los ánimos elevados hasta el cielo y no permitiría que nadie le sacara de sus casillas. Iba a ser positivo.

—¡Hora de la termometría!—canturreó mientras ingresaba a la habitación asignada.

—Oh, aquí esta el torpe que la última vez dijo que estábamos ardiendo en fiebre—dijo uno.

—No señor, no me llamo así—trató de sonar seguro—Mi nombre es Jeon Jungkook y seré su enfermero el día de hoy.

—Torpe te queda mejor, ¿No es así?—preguntó un paciente al otro del costado, causando más risas.

《Aunque, considerando todos los incidentes en los que he estado involucrado, no se equivocan del todo. He sido muy torpe, nada profesional》

—No pongas esa cara. Vamos, sonríe—dijo uno de ellos—No lo decimos enserio, te ves mucho mejor cuando sonríes. Me haces recordar al conejito que tenía cuando era niño.

No era la primera vez que escuchaba aquella comparación. Recuerda que el señor Kim, que era como un abuelo para él, solía decirle que tenía una sonrisa muy tierna, muy parecida a la de un conejito. Sonrió al recordarlo, cuando lo extrañaba. Quería poder verlo.

—Eso es, ¡Ahí está la sonrisa!—apuntó uno con su dedo índice.

—Bueno ahora si debo tomarles la temperatura, puedes llamarme como deseen—dijo—Siempre en cuando cooperen, por favor.

Paso por cada una de las camillas para ponerles el termómetro, para su sorpresa todos tuvieron una actitud positiva y colaboradora. Espero unos minutos, para pasar a recoger y anotar todo en la fichas. Decir que estaba sorprendido por el cambio de los pacientes, era poco.

—¡Ya terminé!—exclamó contento ojeando las fichas—Les agradezco por su cooperación.

—¿Estás seguro de que no olvidaste a nadie?

Volvió a revisar rápidamente las fichas, nunca estaba de más.

—No, está bien—dijo aliviado—Ahora pueden descansar, hasta luego y ¡Gracias!

Se dirigió a la puerta para abrirla, pero antes de salir pudo escuchar muchas voces al unísono, que le hicieron voltear sorprendido.

—¡Buena suerte, Enfermero Jungkook!

—¿Enfermero Jungkook?—se preguntó a si mismo.

Todos se limitaron a darle una sonrisa.

Tras cerrar la puerta tras de él, no pudo evitar sentirse muy contento—Que feliz me siento, me llamaron Enfermero Jungkook.

Se puso a dar saltitos de felicidad por los pasadizos, hasta que se encontró con el Jefe de Enfermería, quien andaba inspeccionando las habitaciones y viendo que todo estuviera yendo como debía. Al verlo, se detuvo frente a él.

—Veo que estás contento, me alegra—le dijo—Pero recuerda que está no es una pista de baile, es un pasillo de hospital—rió.

Jungkook se rascó la cabeza avergonzado.

—Ahora ve, tienes que ir a la otra habitación que se te asignó—le recordó—¡Fighting!

—¡Si, Jin-hyung! ¡Hasta más tarde!—agitó su mano despidiéndose.

Mientras veía al menor alejarse por los pasillos, pensó en lo agradecido que estaba de haberlo conocido. Era un buen chico.

《Los pacientes de estas habitaciones, están mucho más alegres desde que Jungkook está aquí. No hay duda de que es increíble》