40. Raizel.

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40.

Cuando desperté Cavale ya no estaba, no me sorprendió que hubiera decidido irse antes de que sonara la alarma del comienzo del día, porque en las horas de descanso se hacía un apagón tenue de energía y no todas las cámaras permanecían encendidas ─o eso decían─ sería más fácil salir de mi habitación sin ser visto.

Intenté llamar a Esen tres veces, pero no me respondió ninguna de ellas, supuse que se habría ofendido porque no le respondí ayer, por lo que decidí que saliendo del laboratorio volvería a intentar y dejar como último recurso visitarla en la mansión.

Me dirigí hasta el edificio del laboratorio, directamente al área del doctor Asier, el vidrio en su ventana podía ocultar o no lo que hacía en su visita, dudé en molestarlo al notar que no había dejado las paredes espejadas, sin embargo, necesitaba su asesoría.

Con la denegación que había recibido, ya estaba claro que tenía la beca perdida, continuar con el proyecto en la competencia solo retrasaría el obvio resultado.

Mi única carta entonces era conseguir un año más de gracia a cargo del profesor Asier, si al menos lograba el doctorado, podría trabajar en alguna ciudad industrial.

Me permitió pasar al tercer golpe.

──Raizel Astarte ──me saludó──. Toma asiento, me enteré de tu tésis, sin embargo, debo decirte que no me apeno por eso, bien sabes que creo que estabas desperdiciando mucho talento en ese callejón sin salida.

──Bueno, sí, no creo que el doctor me haya rechazado por las mismas razones ──Tomé asiento en la silla frente a su escritorio y dejé mi cartera en la de al lado──. Estuve pensando en retomar un viejo proyecto, bajo su asesoría.

Eso pareció captar su atención de forma automática, extendió su mano para recibir las carpetas con mis avances y archivos, muchos venían en observaciones bastantes planas y hasta poco empíricas que había hecho en el Internado.

Tenía muchas ganas de trabajar en ese proyecto al entrar, con el tiempo y al ver donde iban a parar la mayoría de los recursos, decidí cajonear el proyecto más ambicioso por uno más práctico.

──Ya veo ──comentó──. La capacidad de crear un entorno adaptable para el dhampyria.

──Hay algunas anotaciones no son del todo precisas, pero ya sabe.

──La modificación de un embrión no es ética, Astarte ──acotó, aun así pasó a la siguiente página del folio.

──Cosas de adolescente ──le resté importancia.

──Dudó que muchos adolescentes pasen su tiempo libre divagando sobre la manipulación de fetos para su mejor desarrollo.

Asentí, teniendo la decencia de ruborizarme.

──Pero me gusta, si puedes transformar todo esto en una tésis simple, recuerda, mientras más preciso y simple un proyecto mejor direccionado y fructífero serán sus resultados, pero agendaré una cita para que organicemos esto y mientras puedes empezar en tu puesto.

──Pero todavía no fui aprobada por el Consejo ──rebatí.

──Un poco de papeleo y estará listo, de igual forma tampoco llegarás a tus resultados de una día a otro, así que sería bueno para ti ir empezando.

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