CAPITULO I: KARMALAND.

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El viento soplaba y la tripulación a bordo de "Las Nevadas" se preparaba para desembarcar en el próximo pueblo de la península hiberica, un próspero pueblo con grandes riquezas y por supuesto que no iban a desaprovechar la oportunidad de tomar un poco de dichas riquezas, ese lugar era conocido por su buena defensa y eso lo hacía más emocionante, sin embargo, debían planear una buena estrategia para hacer las cosas más sencillas.

-¿Capitán Big Q?- Un joven pirata miraba a su capitán en busca de respuesta y este no parecía haber prestado atención a nada de lo mencionado.

-Disculpa Arthur, ¿podrías repetir lo que dijiste?- Respondió el pelinegro una vez que salió de sus pensamientos.

-Claro capitán, me preguntaba que haríamos al llegar al pueblo de Karmaland- Arthur miró de nuevo al pelinegro pero está vez con curiosidad y esperando órdenes de su capitán.

-Me alegra que lo menciones- Quackity extendió un mapa sobre su escritorio- Vamos a desembarcar a la 1 de la tarde, a esa hora los soldados del puerto terminan su jornada y son remplazados, ahí está nuestra oportunidad- El pelinegro señalaba cada parte del plan en el mapa-El ayuntamiento, casas de nobles y un burgo están pegados a la costa, Cochi llevará a algunos hombres hacia las casas nobles, Beni se ocupará de mantener ocupados a los soldados en el puerto, y yo iré al ayuntamiento- El pelinegro terminó su explicación y volteó a mirar a Arthur-¿Entendiste?

-Entendido y anotado capitán- El joven pareció comprender bien el plan.

-Todo esto tiene que ser muy rápido, no queremos que tengan tiempo de un contraataque, por eso tú estarás con Beni en el puerto- Arthur se sorprendió un poco por esa afirmación, Quackity suspiro y dijo-Tienes una buena técnica para luchar y serás de ayuda allá- Arthur parecía realmente feliz de escuchar eso, así que solo asintió y salió de la habitación notablemente emocionado.

Arthur era de sus tripulantes más jóvenes y realmente veía potencial en él, era huérfano y solía robar para sobrevivir, a veces sentía que en realidad no había cambiado mucho su vida, pero sabía que la vida que le había dado por lo menos le aseguraba un plato de comida diario en la mesa.

El ya le había explicado el plan a todos con anterioridad, pero Arthur estaba herido ese día y al parecer no habían querido explicarle, de lo contrario no hubiera venido.

Eran las 12 de la tarde y un joven castaño se dirigía al ayuntamiento del pueblo donde vivía y del cual su padre era alcalde, el le había pedido por la mañana que fuera al ayuntamiento pues tenía algo que hablar con él, estimaba llegar a las 12 co...

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Eran las 12 de la tarde y un joven castaño se dirigía al ayuntamiento del pueblo donde vivía y del cual su padre era alcalde, el le había pedido por la mañana que fuera al ayuntamiento pues tenía algo que hablar con él, estimaba llegar a las 12 con 40 minutos y eso estaba bien considerando que su padre lo había citado a la 1, hora en la que se tomaba un descanso para comer.

Una vez llegó al ayuntamiento se le indico subir a la oficina de su padre, al entrar lo encontró tomando la merienda como de costumbre. Su padre alzó la mirada y sonrió al verlo- Hijo, ¿cómo va tu día?- El hombre se levantó de la mesa y se acercó a abrazar a su hijo menor.

-Ha ido bastante bien hasta ahora padre, ¿por qué has solicitado verme?- Luzu miro a su padre curioso y este solo una pequeña risa.

-Directo, como siempre- El hombre se sentó en la mesa de nuevo e invitó a su hijo a sentarse también, una vez ambos sentados decidió volver a hablar- Bueno tu hermano está a punto de tener su primer hijo y me preguntaba si ya conseguiste a alguien para casarte, me preocupa que estés demasiado sólo una vez que ya no esté- El hombre río un poco y espero una respuesta.

-Padre estoy demasiado ocupado con mi trabajo como abogado y no necesito una esposa en este momento- Luzu pudo ver a su padre suspirar cabizbajo.

-A esto me refiero, hijo, entiendo tu compromiso al trabajo pero no te vendría mal algo de compañía, tal vez sea hora de formar una familia- El hombre tomo un bocado de comida y de nuevo espero respuesta.

-¿Y que tal si no quiero una esposa?- Su padre no parecía sorprendido en lo absoluto y el no entendía el punto de la conversación, ¿demasiado sólo?, eso era una mentira y estaba bastante cómodo de esa manera.

-¿Un esposo estaría bien para ti?-El hombre preguntó con curiosidad.

Luzu negó con la cabeza y se levantó de la mesa-No hay motivos para tu preocupación padre, está conversación es absurda, si me disculpas me retiro- Camino hacía la puerta, sin embargo, no pudo salir.

Un soldado irrumpió en la oficina del alcalde y con desesperación afirmó- ¡Alcalde, piratas están atacando el puerto!- Su padre ahora tenía una expresión que mezclaba preocupación y rabia al mismo tiempo.

-¡Luzu, ve a casa!- Su padre ni siquiera lo miró al decir eso- Cierra puertas y ventanas- Su mente estaba en blanco, no era la primera vez que sufrían ataques piratas, pero el tono de su padre lo hizo entrar en pánico. Sal de la habitación y se dirigió afuera, un soldado se ofreció a llevarlo pues al parecer los piratas ya estaban en las casas nobles y le quedaba de paso.

Mientras pasaban por el puerto vio la horrible batalla que se llevaba a cabo ahí, había cuerpos ensangrentados por todas partes, algunos soldados y piratas, había civiles heridos que trataban de escapar del lugar para no salir más heridos o morir,...

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Mientras pasaban por el puerto vio la horrible batalla que se llevaba a cabo ahí, había cuerpos ensangrentados por todas partes, algunos soldados y piratas, había civiles heridos que trataban de escapar del lugar para no salir más heridos o morir, Luzu comenzaba a pensar que debió tomar otro camino y tal vez otro chófer, uno que no lo pusiera en riesgo de muerte.

Su miedo se cumplió cuando el caballo en el que viajaba fue derribado por el impacto de un cañón, el soldado que lo llevaba fue atacado por lo piratas.

Iba a irse cuando vio a un grupo de piratas dirigirse al ayuntamiento, su padre no había salido de ahí y no podía dejar que le hicieran daño, no pensó demasiado cuando corrió hacia el ayuntamiento de vuelta...

Iba a irse cuando vio a un grupo de piratas dirigirse al ayuntamiento, su padre no había salido de ahí y no podía dejar que le hicieran daño, no pensó demasiado cuando corrió hacia el ayuntamiento de vuelta

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Por cierto en este universo la homofobia no es tan común, a la gente le vale con quién te quieras meter, si hay homofobia pero en mucha menor medida.

Alta mar//Luckity//Pirate Au.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora