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acting


Sunoo se encontraba cruzados de brazos mientras observaba a Lee manejar. El menor no quería estar con él, pero tuvo que aceptar por los ojos extra que los observaban.

Realmente le molestaba que Heeseung hubiera aparecido de la nada en su hogar, como si el problema no existiera y pudiera solucionarlo con cualquier estúpida excusa.

Sabía que Heeseung no era un tipo que se disculpaba, sino uno que no aceptaba sus equivocaciones y le valía una mierda los sentimientos de los demás, Aun así, por más enojado que se sintiera, una parte de él aún esperaba que Heeseung le regalara al menos una pequeña disculpa por las cosas que había dicho hace algunas horas.

Sin embargo, el tiempo pasó y heeseung ni siquiera le observaba, tan solo manejaba con tranquilidad, claro, si sus manos no estuvieran apretando con fuerza el volante.

—me quedaré por aquí — le dijo al fin —. Tú puedes irte a beber con quien te plazca, pero no pienso pasar un segundo más contigo — Heeseung decidió mantenerse en silencio, aunque quería decirle muchas cosas.

En primer lugar, Heeseung se sentía aturdido. ¿Quién se creía Sunoo para tratarlo de esa forma y por qué suponía que pasar el rato con Heeseung era una pérdida de tiempo? Demasiadas personas morían por estar a su lado y ese enano simplemente no lo aprovechaba.

Contó hasta diez mientras pensaba en cosas bonitas y que le calmaban. Su linda Simoneth, su trabajo saliendo de maravilla, su madre... sunoo aquella noche.

Se golpeó mentalmente al terminar pensando una vez más en lo lindo que se veía el muchacho en aquella ocasión. No pudo evitar lamentarse por cómo había terminado su relación una vez más.

Él realmente lo estaba intentando, por dios que nunca en su vida había sido tan amable con alguien que no fuera su madre, su nana o su gatita. Quizá era cierto lo que decían de él y heeseung no entendía como formar una relación, quizá en realidad todos los años donde estuvo intentando ser el mejor le pudrieron por dentro.

—Heeseung te he dicho que me dejes aquí — le repitió el menor a nada de perder la paciencia.

Creyó que debería gritarle al mayor o ponerse como loco para ser escuchado, pero en vez de eso Lee se encargó de aparcar el auto para que Sunoo fuera libre.

El menor se quedó quieto. ¿Así tal cual lo dejaría? Sunoo por dentro estaba decepcionado pues creyó que Heeseung podría disculparse por ser tan estúpido.

No era que quisiera ser rogado, tan solo quería que su prometido reconociera sus errores para volver a la tranquilidad. No quería que toda la relación fuera así, a base de faltas de respeto para luego fingir que nada ocurría.

Fingir, lo que siempre habían hecho.

Sin embargo, supuso que así era mejor. Ellos no eran compatibles y jamás lo serían, ni en sus más profundos sueños.

Estaba por abrir la puerta sin decir una palabra más, pero la mano cálida de Heeseung le detuvo. No pudo evitar emocionarse un poco, su corazón latió ante el tacto y a su cuerpo regresó la esperanza.

—yo.... — Dijo observando fijamente al menor.

Se había estado mentalizado, había practicado en su mente qué decir, pero justo ahora todo estaba en blanco. Quería hablar, pero los palabras no salían y eso estaba empezando a disgustarle.

Esto era un completo nuevo mundo para Heeseung, porque él nunca dudaba de sus palabras, no le importaba lo que los demás sintieran al respecto, él siempre terminaría diciendo lo que creía de la forma más brusca.

acting - HeesunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora