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DURANTE lo que restaba del mes de diciembre, julián y amelia no volvieron a verse. la famosa fiesta sucedió a mediados del mes y posteriormente él viajó a su ciudad de origen, calchín. mientras que amelia viajó a parís para pasar las fiestas con su padre y hermano.
de todas formas, ambos siguieron en contacto; primero por instagram y después por whatsapp. varios programas de chimentos no pasaron por el alto el hecho de que los dos comenzaron a seguirse por la red social de fotos, pero sólo fue eso.
el dos de enero, amelia regresó a buenos aires. se reencontró con su mamá y sus amigas, quienes le rogaron que les diera detalles sobre su situación con álvarez. allí se encontraban las cinco, porque se había sumado la mamá de ori, catherine. se habían juntado en la pileta de las bernard, aprovechando el sol arrasante de enero para broncearse.
─ ¿se van a volver a ver? ─ preguntó catherine, con su distinguido acento venezolano. ame juraba que podía pasar horas escucharla hablar, le fascinaba.
─ supongo que si.
─ ¿cómo que supones? ─ preguntó cami, fingiendo indignación.
─ me dijo que vuelve mañana a buenos aires y está en nuestros planes vernos otra vez, pero no acordamos nada concreto.
─ invítalo a casa hija ─ añadió claudia.
─ no ma, es demasiado. todavía no somos nada, solo hablamos. además, dicen que lo van a vender al manchester city.
─ solo hablamos ─ repitió oriana para joderla ─ no seas boluda ame, por más que lo vendan no se va a ir ahora. ya empezó la temporada en europa.
amelia quería ser cautelosa, no quería ilusionarse al pedo. se hablaban y aunque se tiraban palos de vez en cuando, no dejaba de ser en términos amistosos. tampoco sabía como se manejaban los jugadores en cuánto al terreno amoroso, habían muchos estereotipos alrededor de ellos y el principal era sobre lo infieles que solían ser. recientemente había sucedido lo del wandagate y lo que menos quería ella era un quilombo parecido.
ella se había enterado a través de su papá que el manchester buscaba adquirir al nueve de river plate. laurent bernard, se dedicaba a ser un intermediario entre los clubes argentinos y los europeos en el mercado de pases pero también lo era cuando se trataba de algún jugador argentino en el viejo continente. él fue quién logró que messi firmara por el paris saint-germain. claro que cuando laurent le comentó a amelia sobre este posible pase, ella fingió desinterés sobre el tema pero no iba a negar que un poco de preocupación le había generado.
julián y amelia acordaron que al regresar a buenos aires se juntarían, esta vez para conocerse mejor, en contexto, una cita. aunque ninguno de los dos lo llamó como tal por el hecho de que no querían que el otro pensara que la estaban flasheando.
tenían poco tiempo para verse, ya que river jugaría unos amistosos en enero y el castaño apenas volviera comenzaría a entrenarse junto a sus compañeros. ella, por otro lado tenía que viajar a punta del este a hacer unas presencias junto a camila.
en cierto momento de la tarde amelia se adentro a la casa para buscar alguna fruta para comer, sobre la mesada de la cocina se encontró con su teléfono, vió por las notificaciones que julián le había escrito.
juli álvarez amee mañana a la mañana llego a buenos aires te va la de vernos a la tarde?
ame holi juli, si me va
juli álvarez dale hermosa querés venir a mi depto? así no nos joden en la calle
ame oki, llevo algo para merendar entonces <3
─ ¿a quién le sonreís tanto? ─ la jodió cami, interrumpiendo.
─ a una historia de yanina latorre en miami ─ respondió irónicamente la oji azul, morrone no pudo evitar reírse.
─ dale boluda, ¿quién era?
─ julián.
─ aw, estas re enganchada hermana.
─ no cam, ni ahí. pegamos buena onda y no mucho más. por ahí es algo más casual.
─ no te cierres ame, deja que tus sentimientos fluyan ─ la aconsejó su amiga.
─ gracias amiga, ¿querés frutillas? ─ preguntó para cambiar de tema. a decir verdad no tenía muchas ganas de hablar de lo que sentía porque ni ella misma sabía con exactitud que le pasaba.
cami la ayudó a cortar unas frutas para llevarle a las demás. el resto de la tarde continuaron charlando de distintas cosas mientras disfrutaban de la pile y el tiempo libre que el verano les permitía tener.
