Corea.
Bora.
NARRADOR OMNISCIENTE;
Utilizando su maletín de reparo, Siyeon corrió hasta dar con su coche. Poniendo seguro a cada puerta, cerró los ojos. No sentía nada. No sentía nada por esa muchacha secretaria, bueno, tal vez un poco de atracción hacia su cuerpo de modelo, pero hasta ahí. Después de todo, comprendía que era medio tonto sentirse culpable por algo así. Siyeon estaba jugando. Siempre jugaba. El problema era de ella por haberse sentido querida por una escoria como su persona. Siyeon no podía dar más que solo una simple noche de sexo placentero. Solo ofrecía regalos caros y viajes a lugares hermosos. Siyeon era eso. Siyeon no era de las tipas que amaban o llevaban a alguien de la mano. No daba flores. No dedicaba canciones. No cocinaba para nadie. Porque esas cosas no eran para una persona como ella. Siyeon era muy distinta a lo que los demás empleados pensaban. Ellos decían que Siyeon era amable y sensible. Pero al contrario, Siyeon era malhumorada y demasiado egoísta, calculadora y visionaria. Por eso, Yoohyeon la entendía, porque ambas eran exactamente iguales. Al final, bajó del auto.
"Perdóname por tirarte tu propia camisa en la cara. Igual, te odio, Lee".
Siyeon sonrió a medias. Parando en uno de los tantos semáforos, tiró a propósito el teléfono en los asientos de atrás. Era más que obvio que la tipa la perdonaría. Que ella se disculpara. Que las dos lo hicieran. De todos modos, por más que su secretaria le pidiera ahora mismo que regresara, no lo haría ni borracha. Jamás.
"Eres una perra, pero te necesito, Siyeon. Vuelve".
Enseguida, Siyeon sonrió el doble para cuando de nuevo tomó su teléfono, pero esta vez, estacionó y después abrió la puerta.
"Lobo. No pensé verte aquí".
"Solo vine porque estaba aburrida. ¿Cómo va esto?"
Siyeon señaló a la cantidad extravagante de gente millonaria bailar y tomar como locos cerca de la piscina de la casa grande y lujosa. Yoohyeon apretó los labios, algo pensativa.
"Más o menos, no es la gran cosa. Por cierto, tu chica favorita está aquí. ¿Quieres que la traiga para ti?"
"Tú eres mi chica favorita".
"Deja de ser tan homosexual y alzada, por Dios".
Yoohyeon la golpeó.
"Pero si esa eres tú, boba. Quítate".
Entrando por el ventanal que daba directamente hacia la sala, Siyeon se frotó los ojos gracias a la intensidad de las luces de colores brillantes en el techo. Ni siquiera se sorprendió cuando observó otro parlante gigante en medio de la supuesta pista de baile.
"¿Te dejaron salir?"
JiU preguntó a sus espaldas entre una risa burlona.
"Supongo que sí. Tu novia me pidió que viniera, me invitó. Y la otra también me dio el ok. ¿Por qué?"
"¿Novia? ¿De qué me perdí?"
Yubin rio desde la otra punta. Era buena leyendo labios. En eso, Siyeon palmeó algo divertida el hombro de la muchacha pelirroja. Fue tan gracioso su cara de nada.
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Black And White [suayeon]
Fanfiction➤ Bora es prostituta, y madre soltera. Siyeon, en cambio, solo una ejecutiva, más o menos, exitosa, pero idiota en cuanto al amor y las mujeres. Por otro lado, por mucho menos importante, hija adoptiva del señor y señora Lee.