love dive - borrador

24

"Los rumores dicen que..."

Cristian llegó a la cafetería del lugar donde se hospedaban, se acercó a una de las mesas y ahí estaban algunos de sus compañeros que estaban tomando desayunó, se sentó juntó a ellos.

— Llegó la máquina — dice Montiel mirando a Cristian. — Che, casi matas a ese pibe.

Todos se voltearon a verlo mientras seguían llegando sus otros compañeros, Lisandro, Nahuel y Alexis luego de esperar que llegará el ascensor.

— Epa, ¿Escucharon el concierto de opera que dio Cuti? — Nahuel se sentó en la mesa mientras hablaba.

— Mi amor, ¿Te pensas que no queríamos dormir? — pregunta Nico lo miró mientras tomaba del café.

— Parecía una película de terror de tantos gritos. — Dice Julian mientras comía de su desayunó.

Todos en la mesa rieron menos De Paul.

— Ustedes al menos escuchaban los gritos — dice Lisandro mientras tomaba la taza de café. — Los golpes de la cama contra la pared fueron peor — niega.

Volvieron a reír, esta vez llegando el capitán a la mesa, observó a Cristian achicando un poco sus ojos y le dio una palmada en el hombro.

— Cuti ¿Le estabas haciendo nombre al apodo de asesino? — dijo Leo mientras tomaba lugar junto al Papu.

— Yo sólo me estaba despidiendo — dice riendo, Cristian.

— Pero que despedida — Emiliano lo queda mirando.

— una despedida que duró hasta las tres de la mañana. — Enzo niega pegandole en el hombro a Cuti.

— Hubiese durado hasta las seis, si Sonny no se hubiese cansado — se encoge de hombros sin arrepentimientos. — Sólo sé que la pase muy bien.

— Se nota, que pusiste en movimiento a esa maquina — todos explotaron en risas mientras seguía el desayunó.

Salieron para ir al campo de entrenamiento. Cristian no podía ocultar su sonrisa, las bromas sobre lo de anoche seguían, pero él no se arrepentía de nada, había disfrutado cada momento con Sonny, tanto que en ese momento empezaba a extrañarlo.

Pero no podía retener a Sonny, él tenía cosas que hacer, eventos a los que asistir y sabía que el trabajo era importante para él y sabía lo emocionado que estaba por conocer al presidente de su país, por lo que le había contado por experiencias vividas en mundiales anteriores.

El día pasó tranquilo con todo el entrenamiento y bromas.

— Cuti, ¿Ese es tú máximo? — sé volteó al escuchar a Scaloni.

— ¿Qué? — lo mira acercándose.

— Sí ese es tú máximo — lo mira dándole un leve golpe en el brazo.

— Claro que no, sí lo hubieses escuchado anoche, tiene tanto que dar el degenerado — Cristian ríe al escuchar el comentario de Enzo.

— Cállate — lo empujó y siguieron con la práctica hasta  que ya entrada la noche  empezaron a recoger todo para volver a sus habitaciones y darse una ducha.

Salió de la ducha tomando su teléfono que sonaba, él nombre de Sonny estaba en la pantalla. Sonrió para contestar.

— Mi amor — Sonríe al teléfono.— ¿Cómo va tú viaje?

— Hola bebé — dice y jala a Kang In que se estaba yendo por otro lugar. — Apenas llegamos a la escala que tenemos que hacer, te llamaba para preguntarte como estuvo tú día.

— Hyung, ¿podemos ir a comer? por favor — Kang In toma al brazo de Sonny.

— Espera, estoy hablando con Cristian — Lo detiene un momento.

— ¿Estás con el niño? Dile que hola — coloca el altavoz mientras empezaba a colocarse la pijama.

— Sí, quiere ir a comer. Puede pedírselo a cualquiera pero me lo pide a mí — suspira. — Dime

— ¿Qué te digo? — pregunta Cristian acostándose en la cama.

Sonny rodó los ojos. — ¿Cómo estuvo tú día? ¿Cómo estuvo el entrenamiento?

— La pase bien — dice Cristisn. — fue un día normal, como siempre. Pero los chicos lo hicieron divertido —ríe bajito recordando las bromas de sus compañeros.

— Que bueno – sonríe caminando tras de Kang In. — ¿Estás listo para tú siguiente partido? —pregunta.

— Sí, vamos con todo — dice con una sonrisa.

Siguieron hablando por un rato más, le había dicho que estaba comiendo con Kang In en lo que esperaban su otro vuelo y este habló por el teléfono para desearle suerte en el partido.

— Tengo vergüenza de estar al frente cuando lleguemos al aeropuerto — dice Sonny. — Quiero que los chicos sean el centro de atención, no quiero llevarme el foco, ellos también hicieron un gran trabajo — hace un sonido con us lengua.

— Amor, no digas eso. Tú eres el capitán, es obvio que van a querer que estés al frente de ellos, además no lo hiciste mal, diste todo de tí hasta el último minuto, con una lesión — habla Cristian mientras da un botezo.

— ¿De verdad? — pregunta un poco cohibido.

— Tenlo por seguro, sí no fue ahora será pronto, no te preocupes — dice, Sonny suelta un suspiró mientras daba golpecitos en su pecho al sentir su corazón latir con fuerza. — ¿Qué pasó?

— Me da cosa cuando me dices cumplidos — ríe bajito pasando su mano por su rostro.

Kang In lo mira raro. — De verdad sí estás enamorado, hyung —se ríe al ver como el sonrojo sube por las mejillas de Son.

— Cállate — le tira una servilleta.

— ¿Qué pasó? — pregunta Cristian.

— Nada, amor ya nos tenemos que ir, te llamó cuando llegué a Corea ¿Está bien?

— Está bien, no te preocupes ten buen viaje. Te amo — dice al final.

— Te amo, descansa — dice y la llamada finaliza.

Cristian observa los minutos que había durado la llamada y ríe bajito, de verdad quien lo viera, él detestaba demasiado habla por teléfono pero habló casi una hora con su novio, y verdaderamente no quería colgar la llamada pero se vio obligado hacerlo por que tenía que irse.

Dejó el teléfono en la mesita de noche para acomodarse en la cama, para dormir con una gran sonrisa en sus labios, aunque quería a Sonny junto a él, pero ya habrá momento para que estén el tiempo que sea posible juntos, por ahora se iba a concentrar en el equipo porque tenían una meta a la que llegar.

Ser campeones del mundo.

Pero aparte de eso él ya se sentía todo un ganador al tener a Sonny a su lado.

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