love dive - borrador

35

"Bésame, bésame
Infectarme con tu amor
Lléname con tu veneno"

Sonny's Pov.

— Quiero irme a casa, hoy quiero estar solo — dije para empezar a masajear el puente de mi nariz con mis dedos.

Había sido el peor partido que había jugado, todo un fiasco, realmente odiaba la persona en la que me estaba convirtiendo, Cristian conducía el auto en silenció mientras miraba a la carretera. Había una especie de tensión en el auto, mi mirada se mantenía viendo por la ventanilla, mientras pensaba en todo lo que fue el partido. Aunque sabía que era culpa colectiva, no pude evitar sentirme el mayor culpable de todo.

— Pensé que íbamos a ver la película que dijimos en la mañana — Cristian habla después de un rato, mirándome de reojo, para volver la vista a la carretera mientras conducía.

— No tengo ganas — respondí, mi voz salió en un suspiró evitando sonar fastidiado.

Observé el como Cristian suspiró masajeando sus sienes con su mano libre, para darle vuelta al volante y cambiar de dirección para ir a rumbo a mí casa, sabia que empezaba a molestarse cuando su mandíbula se tenso. Di un suspiro pensando en como mí carrera empezaba a irse en picada, en como todo empezaba a ir de mal en peor, en como todo esto empezaba a asfixiarme, La mala situación en el equipo siempre recaía en mi, cómo si yo fuese el culpable de todo el mal del que pasaba, de cada pérdida, el que no podamos tener ningún título por el momento y era molestó cargar con una culpa que no era mía, los hinchas siempre llenaban de insultos mis publicaciones cuando algo salía mal en el equipo, no era justo para mí y obviamente para nadie, pero empezaba a cansarme, y mi motivación empezaba a decaer cada vez más. Las fallas del equipo venían desde un núcleo específico el cuál yo estaba en el medio cuando daba todo de mí sin recibir nada.

— Sonny ¿De verdad quieres quedarte solo en tú casa? —Cristian habla deteniendo el auto en una luz roja, pestañeo un par de veces saliendo de mis pensamientos y rodé los ojos sin evitarlo, sacando mí molestia.

— Sí, solo quiero un momento para replantearme que mierda quiero hacer con mí maldita carrera, solo eso quiero, deja de preguntar maldición — mí voz sale fastidia, hable entre dientes mientras mantenía mí mirada sobre la de él, sus ojos me miraron sorprendido mientras su ceño se frunció con molestia al igual que yo.

Un auto tocó la bocina para que Cristian moviera el auto, la luz había cambiado a verde, mi forma de responderle lo había tomado por sorpresa y se notaba en su semblante duró, porque desde que estábamos juntos nunca le había hablado de aquella forma, su mandíbula tensa, sus ojos más oscuros de lo normal y sus pobladas cejas fruncidas —realmente se veía tan sexy, pero no iba aceptarlo–, hizo una maniobra con el auto frenando en raya, haciendo que nuestros cuerpos se movieran con brusquedad por el frenazo, lo miré molestó por aquella acción pero me trague los insultos, relami mis labios cuando Cristian me observó.

— Boludo, déjate de joder — su acento, su maldito acento salió como una bofetada — ¿Porqué me hablas así? Yo no soy el culpable de lo que pasa, no te descargues conmigo, no te confundas — sus largos dedos presiona el botón del cinturón de seguridad haciendo que este se soltará con brusquedad.

Me reincorporó en el asiento sintiendo el cinturón de seguridad rodear mi pecho, mordí mí labio con todo el enojó encima — lo necesito. —

— ¿Vas a manejar o me bajo? — amenace haciendo lo mismo con mí cinturón de seguridad, intentando abrir la puerta.

Nuestras miradas conectaron hechando chispas, la tensión se había elevado y empezaba a ser asfixiante, Cristian tomó con una mano el volante y con la otra la palanca de cambio, los músculos de su manos y brazos se marcaron por la fuerza que ejerció al momento de tomar aquella palanca y moverla, trague saliva observando cada movimiento de sus manos mientras conducía de regreso a casa, el camino fue tan cortó que al llegar, estacionó el auto fuera de mí casa, le quitó el seguro al auto y bajamos de este en completo silencio, no pensé que me seguiría, me sentí de alguna manera acalorado por lo que estaba pasando que mí cabeza no pensaba con claridad, realmente lo necesitaba —necesitaba que me tomara con fuerza—. Mi boca se hizo agua ante aquella idea de Cristian tomándome con fuerza mientras me decía palabras en español que al final del día eran sólo palabras soeces que de alguna forma me encendían como fuego a la gasolina. Abrí la puerta y empuje está para entrar juntos, su aura fuerte y molesta me envolvía, su respiración era fuerte, demostrando su enojó y ya no podía contenerme. Me volteé mirando sus facciones, luciendo tan enojado y caliente, relami mis labios acercándome con rapidez sin pensar, mis manos tomaron su nuca para así mis labios tomarán con brusquedad los suyos, tomándolo por sorpresa.