Un Zeppeli sobre un Joestar

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En una parte de la ciudad una familia se conocía, teniendo la suerte de que seguramente aquel día terminaría de manera maravillosa. No era el caso de Jotaro.

Él no era un chico de dinero, realmente vivía al día y se distanció de su madre bajo la excusa de estar demasiado grande para ser mantenido pero la realidad era que ya no quería ser una carga para ella.
A Jotaro le dolía no tener el dinero suficiente para disfrutar su adolescencia como un chico normal, debía trabajar y aparte entrenar porque la zona donde vivía era digna de película de terror.

Mínimo contaba con su apariencia para ayudarse con empleos donde le pagaban bien. Más no se esperaba aquel día tener un cliente desagradable, más bien dos clientes que le agradaban pero no juntos: Kakyoin y Caesar.

ㅡ ¡Hola JoJo!ㅡ un pelirrojo se lanzó a abrazar a su mejor amigo, a sus espaldas venía otro rubio, Jotaro mantuvo la mirada firme a Caesar.

ㅡ Hola Nori, ¿Qué haces aquí?ㅡ Jotaro revisó su relojㅡ es muy tarde, a esta hora es peligroso que estés en la calle, te podrían asaltar.

ㅡ Te preocupas demasiado… y no vengo solo; Caesar vino conmigoㅡ el chico tomó la mano del rubio, Jotaro levantó la ceja por aquella forma tan cercana que estaban teniendo ambos.

ㅡ Hola, lindo trajeㅡ Caesar saludo intentando fingir no darse cuenta de la intensa mirada que Jotaro ponía sobre él.

ㅡ Graciasㅡ Jotaro limpió su ya de por sí impecable uniforme, el chico trabajaba en una tienda de trajes italianos en la que también fungía de modelo masculino.

ㅡ La familia de Johnny va a ir a su casa a cenar, me contó que tiene el mismo traje desde que se graduó de secundaria y le dije que comprará uno aquí contigoㅡ Kakyoin le explicó la situación a Jotaro, el pelinegro asentía.

ㅡ Pudo venir conmigo, yo lo hubiera traído directo desde la escuelaㅡ Jotaro sonrió a los dos, ya un poco más relajado.

ㅡ Quería invitar a Kakyoin a cenar primero, sería grosero no agradecerle apropiadamenteㅡ Caesar sonrió en un gesto coqueto, Jotaro se tensó nuevamente.

ㅡ Fuimos a un restaurante italiano muy bonito, ¿Recuerdas a Tonio? Trabaja ahí pero no sabía que también lo hacía por...ㅡ mientras el pelirrojo cómo de costumbre hablaba sin parar, Caesar tenía una guerra de miradas con Jotaro. ㅡY es por eso que vinimos juntosㅡ finalizó Kakyoin con una sonrisa.

ㅡ Entonces deberíamos ayudar a Caesar a verse guapo para su cena de hoyㅡ Jotaro puso sus manos en la cintura de Kakyoin cómo era costumbre, el pelirrojo rió nervioso y se apartó. El gesto de evasión lastimó profundamente a Kujo pero nuevamente no lo demostró.

ㅡ Vamos Caesar, te ayudaré a elegir un colorㅡ y mientras Jotaro vió a los dos irse se dió cuenta de lo bien que se veían juntos.

Porque Kakyoin Noriaki quería ser pintor pero él no tenía el dinero para poder darle ni siquiera un lienzo para pintar, en cambio Caesar Zeppeli era un sol brillante en la lejanía de la galaxia de diferencias. Él era guapo, rubio, de ojos verdes, de familia acomodada, tantas cosas de las cuales solo podía añorar. Jamás deseó tener nada de nadie más que el amor de Kakyoin Noriaki para sí mismo y frente a sus ojos se estaba yendo con otro chico.

ㅡ Te verás muy lindo en verde, ése color seguro hace tus ojos más bonitosㅡ escuchó a la lejanía la voz de quién ya no sería más su casi algo.

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Gyro, El Autista •GyJoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora