Cada día lo observo, no sé cuándo comenzó está obsesión, poco a poco caí en cuenta de las pequeñas particularidades de Julius, desearía poder hablarle, decirle lo que hace con mi corazón pero todos mis pensamientos quedarán en nada; porque él es aut...
Fugo había puesto una búsqueda por Giorno Giovanna acompañado de Dio Brando, el hombre tenía unos años más que ellos dos pero con eso era suficiente para ser su tutor legal. El albino lo había buscado desde el momento que lo dejó para devolver su teléfono pero no recordaba en cuál estación lo dejó, Fugo había caminado hasta calmar su furia y cuando lo notó ya estaba a medio Estado de distancia. En lo que regresaba, daba con la parada, etcétera ya había pasado bastante tiempo. Se comunicó con Bruno pero nadie lo había visto, el muchacho se sentía un imbécil.
ㅡ Ya apareceráㅡ le dijo Dio intentando tranquilizar al chico, Fugo gimió frustrado.
ㅡ No lo sé Dio, me da miedo que la esté pasando realmente mal y no lo pueda ayudar; ¡Que tal que está vendiendo drogas en Italia!ㅡ Dio le tendió su suéter al chico, el pobre no había parado de llorar en todo momento.
ㅡ No lo creo, Giorno no es... Tan inteligenteㅡ intentó sonar algo positivoㅡ le servirá estar solo para ser un poco más independiente de ti.
Dio los había conocido cuando ambos tenían 13 y él 18; en aquel momento los vió como unos niños perdidos pero siempre admiro el coraje de Fugo para pelear por Giorno. Eran salvajes, testarudos, pero eran dos diamantes en bruto que él quería cuidar. Dio en su adolescencia buscó becas por montones puesto que no podría mantener a dos niños y en eso pudo darle a Fugo la oportunidad de estudiar en el extranjero. El chico tras conseguir su título regresó al lado de Giorno pero no fue muy bien recibido.
ㅡ ¿Independiente? Giorno no depende mi para absolutamente nadaㅡ El hombre intentó no rodar los ojos, era obvia la gran dependencia de Giorno por él.
ㅡ Perdón, yo malinterprete las cosasㅡ rió algo risueño, Fugo a su lado algo rojo del frío tenía un carácter algo más serio a comparaciónㅡ deberías ir a casa Pannacotta, te vas a resfriar.
ㅡ No creo que me quieran recibir, Bruno dice que no hay problema pero Trish y Mista seguro me van a volver a decir traidorㅡ el chico suspiró pesadamente, estaba harto de que todos lo considerasen una mierda por haber elegido ser feliz y vivir antes que fracasar.
ㅡ Ven conmigoㅡ ofreció Dio poniéndose de pieㅡ no tengo una casa grande o una familia ruidosa pero te puedo dar comida, una cama caliente y una biblioteca llena de librosㅡ le ofreció su mano para que lo siguiera a su auto, algo dudoso Fugo la tomó.
ㅡ ¿Biblioteca?ㅡ el de ojos rojos miró a los otros azules, Dio sonrió.
ㅡ Una tan grande que necesito toda la salaㅡ sin dudarlo Fugo lo acompañó dispuesto a intentar llevarse bien con aquel hombre apenas unos años mayor.
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ㅡ No, está con nosotros, lo trajimos de vacaciones, te juro que en cuanto ví las publicaciones pensé en llamarteㅡ Johnny al teléfono llevaba media hora hablando con Bruno, Gyro consolaba al chico insistiendo que todo estaría bien.
