Era muy temprano en la mañana y las doncellas de la princesa ya estaban tocando a su puerta para vestir a la joven. Visenya abre sus ojos pesadamente, y se acomoda en la cama para sentarse y lista para decirle a las doncellas que entren. La princesa se había olvidado de un detalle que había permitido que Aemond durmiera con ella.
-vuelvan en un rato-les ordena la princesa cuando ve a Aemond a su lado. Las doncellas no responden, pero no seguían tocando la puerta lo que intuyó la princesa que se habían marchado.
-Debes irte!-Visenya levanta a empujones a el príncipe Aemond debido a los empujones brusco de la principesca este se cae de la cama.
-que sucede-se levante el príncipe del suelo algo soñoliento.
-Mis doncellas viene a prepárame, si te ven aquí, dirán cosas que no son-Aemond se levante y se pone su chaqueta, la cual se encontraba en el sillón de la princesa.
-Nos vemos-este se acerca Visenya y le intenta dar otro beso, pero está lo rechaza
-Que haces?-le pregunta la princesa.
-Yo... lo siento-El príncipe se marcha de la habitación algo avergonzado por el rechazo de la princesa. Para su suerte ha esta hora los guardias cambiaban de turno, y la puerta de la princesa se encontraba sin guardia. Pero no corrió tanta suerte cuando su madre lo ve saliendo de la habitación de Visenya.
-que haces en la habitación de tu hermana?-le pregunta su madre. Aemond el cual estaba en el sentido contrario de la reina, se voltea a ver a su madre que caminaba hacia el enojada.
-pase a saludarla-miente Aemond. Alicent agarra a su hijo menor del brazo, y camina con el hasta final del pasillo. Alejándose de la casa habitación de la princesa.
-Nadie te vio salir?-pregunta la madre soltando el brazo de su hijo.
-No, mama-contesta Aemond.
-Cariño, Cuando Visenya cumpla 13, sera comprometida a Aegon-Aemond niega levemente con su cabeza.
-Ella no va a querer casarse con el-Responde Aemond con algo de furia en su voz.
-No es lo que Visenya quiera hijo, así son las cosas- Alicent intenta calmar a su hijo, pero este no dice nada más y se marcha a sus apocentos.
Por otro lado ya las doncellas de Visenya la habían ayudado a cambiarse. Y le habían notificando que la esperaban en las clase de costura. Pero Visenya no le interesaba nada esas clases, ella pensaba que era una pérdida de tiempo, así que como no podía entrenar con sus hermanos se dirigió a la biblioteca, tomó su libro favorito sobre la conquista y tomó asiento. Las doncellas le habían traído su desayuno a la biblioteca así que mientras leía le daba bocado a su comida.
-Visenya no se supone que estes en tus clases-La voz de su madre invade los oido de Visenya. Esta levanta su mirada del libro y observa a su madre en el borde de la puerta.
-Si, pero no quiero ir-contesta la
Joven. Y vuelve su vista a su libro.
-haz leído ese libro millones de veces, puedes leerlo después- Visenya no se inmuta en acerle caso a su madre y continúa leyendo el libro.-Visenya!-su madre camina hasta ella y le quita el libro.
-No quiero ir a esa estupida clase-responde Visenya de manera sangrona.-Si dices que seré "reina", no se de que le sirve saber coser-
-Tienes que aprender a comportarte además coser es una manera de entretenerse-Visenya le dia una mirada incrédula a su madre.
-Leer es mi entrenamiento-contesta la joven.
-Te levantas ahora mismo y vas a tus clases-le ordena la reina pero esta niega.
