Al paso de los días Aemond hizo todo los posible por evitar a Visenya. Todos los intentos de la princesa para acercarse a su hermano fueron evadidos por el. Esto tenía a la princesa devastada ya que estaba apunto de irse y no se iba a despedir de Aemond. Por otro lado Alicent estaba dolida pero aún así amaba a su hija, y no podía dejar que se fuera sin despedirse.
Visenya se iba en la tarde, así que temprano su madre la llamó para un desayuno solo ellas dos. La princesa se había puesto un traje que su hermana mayor le había hecho llegar la noche antes de irse. Era con los colores de la casa Targaryen negro y rojo. Todo lo contrario a el color que usaba la princesa, el cual era el color de la casa de su madre verde.
Al Alicent ver a su hija llevar con ese vestido casi sufre un infarto, no tan solo le estaban arrebatando a su hija, también la estaban cambiando.
-Y ese traje cariño?-le pregunta Alicent cuando ya la princesa había tomando asiento junto a ella.
-Rhaenyra me lo envio anoche -contesta la princesa, tomando un poco del té que había en la mesa.
-Ya veo -contesta Alicent dándole una sonrisa a su hija. Y a la vez tomando un poco de te.
-Madre, Aemond no ha querido hablar conmigo-Responde Visenya tristemente.
-Aemond esta muy dolido, ustedes eran muy unidos y esto es difícil para el-
-Lose y no deseo irme sin despedirme de el- Contestó Visenya con tristeza en su voz.
La reina se levanta de su asiento para ir a confortar a su pequeña hija. Visenya se levanta al ver que madre iba a darle un corto abrazo. La cara de la reina lo decía todo, estaba muy dolida y molesta con todo lo que estaba pasando. Y no estaba molesta con su pequeña si no con Rhaenyra. Ella era la causante de llenarle la cabeza a Visenya de estupideces según la reina.
-Cariño, para mi tanto como para Aemond es muy difícil dejarte ir, y sabes lo sensible que puede ser Aemond-La reina acaricia el cabello platinado de su hija.
-Sabes donde está?-pregunta la princesa. Y su madre acierte levemente.
-lleva días en sus aposentos, no ha querido salir- Visenya baja su mirada sabiendo que ella era la causante de la tristeza del príncipe.
-Creo que es mejor que me quede-responde Visenya con un tono entristecido.
Ella no quería seguir viendo a sus familiares tristes y mucho menos a su Aemond, y si Visenya debía sacrificar su felicidad por la de su familia lo iba hacer. El rostro de Alicent se torna de felicidad pero esta desvanece cuando recuerda las palabras de Viserys. "Auqnue Visenya no quiera irse, se irá a Dragone Stone con Rhaenyra".
-Cariño-Alicent la abraza fuertemente y apuntó de llorar. -No quería decirte esto-Alicent rompe el abrazo-Que tu vallas a Dragone Stone fue una orden que Rhaenyra le pidió a tu padre-Visenya la mira con sorpresa.
- a que se refiere eso?-pregunta la princesa con confusión.
-Aunque no hubieras querido irte, te hubieran obligado- Responde la Reina. Esta confección provocó desepcion en el corazón de Visenya, Rhaenyra no podía obligarla ella no era nadie para obligarla a irse.
Alicent podía distinguir cuando su hija estaba enojada, triste o decepcionada y en estos momentos podía notar que tenía un poco de las tres -Cuando fui a decirle a el rey que no ibas a irte a Dragone Stone, me informó que era algo que no estaba a discusión y aunque no quisieras ibas a ir-
-Tenías razón, ellos quieren alejarme-Dice Visenya entre sollozos y abraza a su madre.
-Tranquila mi pequeña-Alicent acaricia el cabello de su hija mientras está lloraba. -Mira-La reina alejan un poco a la princesa. Se pone a la estatura de está agachándose un poco y limpia las lágrimas de su pequeña. -Vas a ir a Dragone Stone un tiempo, y luego buscaremos una excusa para traerte de vuelta, pero mientras tienes que ayudarme en algo-
-En que?-pregunta la pequeña un tanto ya calmada.
-Cuando estes en Dragone Stone, quiero que me informes de cualquier cosa que pase-Visenya frunce su ceño algo disgustada por lo que su madre había propuesto.
-Eso no es correcto-Dice la princesa.
-Vivimos en un mundo donde hacer lo correcto no nos lleva a nada-La princesa aún seguía alfo disgustada pero aún así acertó.
-Esta bien madre, quiero pasar a ver a Aemond, nos vemos en la salidas-La princesa de despide de su madre y se marcha para así poder dirigirle a los aposentos de Aemond.
Mientras Visenya caminaba sus pensamientos invadían su mente. Porque Rhaenyra quería que se fuera a Dragone Stone. A Visenya le era difícil creer que la razón del deseo de alejarla del Castillo era por la corona. Rhaenyra no se veía así.
Finalmente había llegando a la habitación del príncipe antes de entrar dejos sus pensamientos a lados. Vianya le pidió a los guardias que no la anunciaran ante el príncipe ya que sabía que este no quería hablar con ella. Ellos accedieron ya que sabían lo unidos que eran los niños. Los guardias le abren la puerta a la princesa, y esta entra y observa a Aemond acostado en la cama. Los guardias cierran la puerta y la princesa con pasos cautelosos se adentraba en la habitación.
-Aemond?-la princesa llama a el príncipe. Aemond a escuchar la voz de Visenya no se inmuta en moverse y se queda acostado en la cama.-Podemos hablar-Visenya se recuesta de los pilares de la cama de Aemond.
-No-contesta el príncipe sin moverse.
-Esta bien, Pero al menos escúchame- Visenya hace una breve pausa a ver si Aemond decía algo pero no fue así.-Se que te molesta que me marche, siento mucho tener que hacerlo ahora cuando se sobre tus sentimientos, pero Aemond si me quedo aquí me casare con Aegon y tal vez estando lejos tenga la posibilidad de estar con alguien que si quiera ...Como a ti- Visenya se quedó esperando si Aemond almenos le decía algo pero como no fue así ella solo soltó un suspiro-me iré en unas horas, si te quieres despedir de mi te espere en media hora en pozo dragón-
La princesa se da la vuelta para irse, y aún así no conseguía ninguna respuesta. Salió de la habitación conteniendo las lágrimas. Porque ella quería irse sabiendo que Aemond iba a estar bien con eso. Pero no fue así, el príncipe estaba muy resentido y no quería saber nada de Visenya.
