Cuando el peligro acecha.

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- ¿Piensan regresar a Liang?.- La Emperatriz Lian Hua sonreia con sorpresa.

- Zhan quiere regresar para nuestro aniversario.- Yibo caminaba junto a ella mientras le permitia apoyarse de su brazo.

- Me parece bien.- Asintió.- Zhan ha estado muy ocupado últimamente con los asuntos militares. Es justo que descance.

- Esa fue una de las razones por las que hice que nuestro hijo se encargara del entrenamiento militar. Tambien está el hecho de que como principe heredero debe irse familiarizando con aquellos que le deben ser fiel.

- Aún no creo que nuestra peonía se haya convertido en un hombre.- Suspiró evocando una sonrisa.- Miro hacía atrás y me parece verlo aún dando pequeños y rapidos pasos mientras trata de alcanzarme.

- Nuestro hijo ya creció.- Tomó su mano y la frotó.- Y se volvió un hombre capaz, valiente e inteligente. Está listo para ser el siguiente monarca de Yang.

- Nada de eso.- Sonrió mientras acomodaba las solapas del alfa.- Usted, mi querido Emperador, va gobernar durante mucho tiempo.

- Ven aquí.- Tiró suavemente de su mano guiandola a uno de los asientos de aquel lugar.- Nos vemos cada día y platicamos sobre muchas cosas.- Se sentó a su lado.- Pero siento que hay algo lo cúal no te he dicho muy a menudo.

- ¿Eso qué es?.- Sonrió.

- Gracias.- Se quedó viendola.

- ¿Por qué agradece?

- Son tantas cosas por las que tengo que agradecerte pero especialmente te agradezco porque a pesar de todo te has mantenido firme a mi lado y nunca has culpado a Zhan sobre lo que ocurrió entre nosotros.- Bajó la mirada.- Quizas me culpes y no puedo quitarte ese derecho...

- Nunca lo he culpado.- Lo interrumpió.- Tampoco lo he resentido si cree que es así.- Frotó suavemente la mano del alfa.- El lazo del matrimonio nos unió como esposos pero la vida dos quiso como amigos...compañeros.- Sonrió.- El tiempo me ha demostrado que a pesar de todo usted siempre estará ahí para mí, tal y como cuando eramos niños.

- Siempre será así.- Rodeó sus hombros con su brazo.- Puede que no hayamos podido continuar como los amantes que una vez fuimos pero quiero que tengas claro que para mí eres muy importante. No solo porque seas la madre de mi hijo y mi Emperatriz...eres mi familia.

- Ustedes tambien lo son.- Recostó su cabeza del hombro del alfa.- Tú, Zhan y nuestros 3 principes son mi familia.

- Una familia que seguirá unida sin importar qué.

Eran muy pocas las veces en las que el Emperador y la Emperatriz se tomaban el tiempo para hablar sobre los asuntos del corazón, sobre sus sentimientos y cuando lo hacían era de la forma más sincera y dulce.

Habían pasado de ser un par de esposos a convertirse en compañeros. No se consideraban amigos, entendían que esa palabra era muy pequeña para lo que tenían.

Preferían llamarse familia.

Así como en el pasado, mucho antes de que el Emperador Wang tomara el trono, alfa y omega se habían convertido en un par de compañeros especiales los cuales estaban para apoyarse en el bien y el mal.

Juntos habían creado una familia, juntos habían levantado y gobernado un imperio. Ahora, juntos...seguían recorriendo el largo camino que habían emprendido cuando apenas eran unos jovencitos pero ahora lo hacían como grandes compañeros.

.............

- A partir de hoy el campo de entrenamiento y los soldados están en tus manos.

- Gracias Padre Zhan.- MuDa mostró una sonrisa gentil.- Aunque si le soy sincero me siento un tanto preocupado.

Yizhan.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora