Alice

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Justo al borde del orgasmo Harvey se detuvo, quise protestar pero ya sus labios estaban sobre los míos en un beso corto y profundo en el que mi sabor se mezcló entre nuestras bocas.

Entonces me di cuenta de que lo que Harvey quería era que llegásemos a la liberación de nuestros cuerpos estando unidos.

Solo que como había prometido
quería ser yo quien lo llevara al límite.

Lo vi agacharse frente a su maleta y sacar un preservativo que se colocó con agilidad.

Solo pensaba en tener su gran erección ardiente y palpitante dentro de mí.

Llevando una mano sobre su pecho lo empujé de espaldas sobre la cama y me subí a horcajadas sobre él, acaricié todo su torso y me incliné para susurrar sobre sus labios.

-Ahora solo quiero follarte.

Y me deslicé por su miembro lentamente, sentía cómo me dilataba,
era tan grande y duro que pensé que no podría abarcarlo entero.

En un punto tuve que parar, era demasiado.

Gemí fuertemente por la intensidad de tener su pene en mi interior.

Harvey me tenía sujeta de las caderas y me miraba mordiendo su labio inferior aguantando su placer para que yo me adaptara, pero no quería que se contuviera por mí.

Imaginar cómo se vería Harvey corriéndose fue tan fuerte que de un empellón hice que penetrara en mí completamente, hasta el fondo.

Se sintió magnífico.

-Arg…joder, sí.

-Ah, ah es tan grande, Dios Harvey, me gusta.

Comencé a moverme sintiendo que una corriente de excitación recorría mi cuerpo entero.

No podía parar ni un segundo.

El pene de Harvey era enorme en mi interior y su calor hacía que me mojara cada vez más.

-Más rápido, más… Arg.

Los gruñidos de Harvey me volvían loca, el sexo entre nosotros me hacía alucinar, y sentía que el orgasmo se acercaba inminente.

Aumente la intensidad de las penetraciones en un ritmo intenso y
continuo.

-Voy a correrme…estoy a punto…Oh Demonios Alice…

Apreté mis músculos internos sobre la polla de Harvey y saber que se estaba corriendo en mi interior, me hizo venirme tan fuerte alrededor de él que todo dio vueltas y un prisma de colores pareció estallar detrás de mis ojos como fuegos artificiales.

Caí agotada sobre su pecho y con una sonrisa en mis labios.

Todo por las pastillas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora