AMITY BLIGHT
A quién desde pequeña se le enseñó que sólo a través del sobre esfuerzo y la obediencia se llegaba a la perfección, que la crueldad era sinónimo de competitividad, y que mantener las apariencias lo era todo. Pasó su vida tratando de cum...
Eda hizo un círculo de luz con su mano, inmediatamente las pocas cosas que aún quedaban se fueron envolviendo junto con la carpa hasta formar un pequeño saco. De hecho es bastante práctico tener magia ahora que lo pienso. -Bien, ¿Nos vamos?- dijo extendiéndo me su mano, montada en lo que parecía ser su bastón. -Bien, ¿Por qué no?- aún dudosa acepté. Al apenas subir me arrepentí inmediatamente, estábamos volando a toda velocidad, sentía mis lágrimas saliendo y mis cachetes agrandarse a causa del viento en contra, y lo peor de todo es que no había mucho de donde poderme aferrar. -Ya puedes abrir los ojos, humana.- dijo Eda deteniendo la velocidad mostrándome el paisaje. -¿Qué lugar es este?
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-Estás son las Islas Hirvientes, cada leyenda que existe entre los humanos es causada por un poco de nuestra magia que se filtra en tu mundo.- La vista simplemente era alucinante, pero lo que más resalta son los restos de un ser colosal, su cuerpo mismo eran las islas hirvientes, su cráneo, los cuernos sobre su cabeza, sus costillas sobresaliendo, el paisaje es simplemente espectacular.
Cuando bajamos al nivel del suelo, pude encontrarme frente a una imponente casa de estructura rústica y elegante, la cual cuenta con una chimenea, una torre como de castillo y se hallaba convenientemente junto a un río, la fachada era lo que más me resalta, esta es completamente blanca con el tejado de color azul marino, pero lo más llamativo es la enorme ventana circular, el diseño del vidrio me recordó un poco al ojo de Sauron del señor de los anillos.
Al acercarnos a la puerta, lo que al principio luce como una simple decoración, resultó tener vida propia... -¿QUÉ CARAJOS ES ESO? -El es Hooty, mi sistema de defensa. -Hoo, Hoo, contraseña por favor. -No tenemos tiempo para esto, Hooty, ábrenos. *procede a picarle el ojo* -¡Ouch! Está bien, no dejan a uno divertirse.- (abrió su boca hasta extenderla por todo el marco de la puerta). Dios, no es bonito sentir que estás siendo devorada.
-¡BIENVENIDA A LA CASA BÚHO! .- La casa literalmente está llena de magia como en las películas, los trapeadores y escobas estaban haciendo las labores del hogar, velas que se prendían por sí solas, montones de artefactos mágico, la sala era amplia y acogedora. -Es un lugar muy hermoso- solté sin querer perder ningún detalle de la casa, me sentía tan agradecida por permitirme entrar en su hogar.
- ¿Vives tú sola aquí? -De hecho... Tengo un compañero. -¿Quién se atreve a interrumpir a King, el rey de los demonios?- se quejó alguna especie de ente, que entre más se acercaba su grande e intimidante silueta comenzó a disminuir revelándose al fin. Mis ojos se llenaron de ternura al verlo, era una pequeña criatura como del tamaño de un zorro adulto, su pelaje tiene dos tonalidades de gris, claro y oscuro, sus ojos son amarillos con las pupilas color carmesí, y su cabeza es lo más adorable, esta es un cráneo con un cuerno roto. -¡Ay, que lindo! (dije en mi lengua materna, mientras me lancé a abrazarlo). -Eda, es muy tierno, ¿Quién es mi pequeñín? ¿Quién es mi pequeñín? Eres tú, sí lo eres. -Nooo, no soy tu pequeñín, Eda ¿Quién es este monstruo? (chilló la criatura evitando a toda costa mis muestras de afecto). -Ella es Luz, la humana está aquí para ayudarnos con nuestro "problema"... Verás, (forma un círculo mágico produciendo unas especies de imágenes) King solía ser el rey de los demonios hasta que le robaron su corona, la cuál está en manos del malvado guardián Wrath, sí nos ayudas a recuperarla te devolveremos a tu mundo... ¿Entonces qué dices? -Supongo que no tengo más opción, ¿verdad? - Jajajaja Chrum. No y no hay tiempo que perder. [CHRUM onomatopeya del ronquido de un cerdo.]
