19; arg - mex.

6.6K 410 49
                                    

Doha, Qatar.
Rodrigo—.

Hoy tenemos que ganar si o si, se juega Argentina - México y estamos obligados para clasificar a octavos.

Estamos confiados, más confiados que nunca me atrevo a decir. Sabemos que tenemos que ganar y lo vamos a hacer. Tenemos un buen equipo, lo somos. Sólo que en el partido anterior nos confiamos y pasó lo que pasó.

Hoy estoy feliz, motivado, apesar de la pelea que tuvimos con Clara, que de ahí no nos volvimos a ver por que la próxima visita es después de este partido, no hablamos más sobre nosotros sólo hablamos si se trata de Bas nada más. Incluso le pedí perdón a las horas de la discusión por que me di cuenta que actúe de calentón nomás, pero no me respondió y sólo responde o me escribe si se trata de nuestro hijo pero igual dijo que iba a venir y mi hermano me dijo que iban a estár en el palco con Clara y su familia así que esa noticia me hace salir a la cancha motivado.

Cuándo entramos al campo de juego junto con la selección mexicana el ambiente en el estadio ahora si puedo decir que están los argentinos de verdad, sus canticos y bombos resuenan por todo el estadío, no como en el partido contra Arabia Saudita que ni siquiera cantaban ni mucho menos alentaban.

Ya formados busco un palco en específico y lo encuentro, allí veo a toda mi familia con camiseta con mi número de dorsal y banderas argentina, también están los papás y hermano de Clara pero con la camiseta de Lio, por último veo a las dos personas que realmente estaba buscando: Clara es la única que está parada cantando cómo loca y con la mano izquiera la agita al ritmo de "Muchachos" con la camiseta con mi numero y apellido mientras que con la mano derecha sostiene a mi hijo, el cuál ríe al ver a su mamá tan eufórica, Bas también tiene puesta una camiseta de Argentina con mi número pero atrás dice 'papi', Clara le puso un protectores auditivos por que es muy chiquito y tanto ruido le puede afectar.

Al verlos a los dos con mi camiseta puesta pareciera que vuelvo a nacer, es una sensación tan linda que sólo puedo sonreír al verlos, estoy tan enamorado de ellos dos que es increíble. Es un poco bajón también tener que ver que su familia, cómo ya no me quiere, usa la camiseta de Lio y no la mía cómo toda la vida lo hicieron pero me conformo mucho con ver a Cla y Basti con la mía. Les ganan a todos.
Clara está espléndida, vino sencilla pero siempre resalta entre todas así venga con pijama, es la más hermosa y nadie lo puede negar.

Luego de que pasen ambos himnos nos posicionamos cada uno en su lugar, me presigno y miro por última vez al palco y les tiro un beso antes de que el árbitro pite el inicio del partido y la pelota empiece a rodar.

• • •

¡Ganamos!

Dos se comieron los mexicanos por boconearla antes de jugarlo.

La felicidad es total por que nos queda sólo ganarle a Polonia y estamos dentro de los octavos de final.

Me abrazo con Ota y él me habla cuándo nos separamos.

—Mirala cómo está—señala y yo rio al ver a Clara cantando y saltando junto a su hermano y su papá cómo locos felices—Aprovechala boludo, dejá de hacer tantas cagadas que mira lo feliz que está, no te la mandes.

Asiento con la cabeza y sólo veo a Cla, que está emocionada cantando y saltando, ella es la que más confía en mi y yo soy un pelotudo nomás.

—¡Rodrigo tenés nota, anda!

Me avisan y voy hacía dónde está el periodistas que me va a entrevistar.

Bastián; Rodrigo de PaulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora