The Allure Of the Darkness ( Klaroline Ficc)

Doubts

Sin saber muy bien como, amaneció demasiado pronto o al menos así lo percibió, cuando los rayos de una luminosa mañana cayeron sobre su rostro, para entonces se hallaba completamente sola, en aquella enorme cama, al lado de la cual por cierto había un inmaculado féretro de elegante madera, esto realmente la había impresionado un poco, resultandole algo extraño, no imaginaba que aún ellos usaran esas cosas, en estos tiempos modernos, aunque era evidente que Klaus prefería la comodidad, le seguía sorprendiendo aquel artilugio que no había notado durante la noche, mientras se preocupaba más de tranquilizarlo que de lo que había a su alrededor, se preguntó si realmente les eran necesarios para trasladarse en viajes muy largos o por qué razón habrían de usarlos, porque asumió que el resto de su familia o al menos Rebekah, Elijah y Kol también tendrían unos ya que si mal no recordaba alguna vez en sus primeros encuentros con los originales, Stefan le había hecho una jugada muy astuta a Klaus amenazandole con los de su familia precisamente, y para variar en un intento suicida por salvar a su amor de esa vez. En opinión de su novio todo el mundo merecía un sacrificio de su parte, menos ella al parecer, y recordar eso le dió un mal sabor de boca o tal vez el hecho de que hacía mucho no sabía nada de él___ despacio fué retirando las sábanas de su cuerpo.

Klaus no se había molestado en despertarla, al saber que solo estaban ellos y las niñas en la casa, pues los demás estaban ocupados en otras cosas, probablemente había creído que no era necesario ocultar que había dormido en su habitación, ahora sin la adrenalina de la medianoche tormentosa, las pesadillas y la obscuridad corriendo en sus venas, podía apreciar el lugar, era lo suficientemente amplia pero austera de hecho, y en poco tiempo concluyó que era justo como él, un espacio digno de su dueño que aunque se preciara de ser un ególatra, narcisista y despiadado, en el fondo sabía que no tenía nada de lo que alardear pues sus acciones, malas, y las que no lo eran tanto, últimamente, o al menos desde que nació su hija, hablaban por él y debajo de aquella montaña de errores, maldades y terror se escondía en realidad un hombre simple, con emociones complejas, pero con una gran riqueza interior que al fin y al cabo salía a la superficie ya fuese por Hope o por su familia, pero que siempre estuvo allí.

Pasó sus manos ligeramente por el lado donde él había estado, su aroma inconfundible aún en las sábanas que habían compartido; y se dió cuenta entonces que nunca había estado así con nadie, ni siquiera con Stefan pues la vez que había terminado durmiendo en sus brazos, había sido también cuando se declararon sus sentimientos y estuvieron juntos por primera vez, antes de eso ni siquiera como amigos habían compartido un momento tan íntimo y por más que quisiera negarlo, no recordaba que esa vez hubiese sido tan mágica como esta dónde, a pesar que no había nada sexual en medio, había sido especial e intensa como para ignorarla, al contrario, eso la intrigaba y alarmaba pues implicaba reconocer lo alejada que estaba de quien hasta entonces suponía sería su único y verdadero amor; y como si alguien lo adivinara escuchó alto y claro el timbre de su teléfono en la habitación cercana; Imaginó que Klaus estaría con las niñas y a toda prisa salió para tomar el aparato cuando ya estaba a punto de sonar el último tono.

______ Caroline, ¿Estás bien, por qué no contestabas?____y sí, efectivamente era él, no podía definir lo que sintió al oír su voz, pero no parecía algo bueno, o quizás era peor que eso, pues tal vez... Solo tal vez, no era nada y eso no era algo que le hubiese ocurrido antes de venir a Nola, antes siempre quería oír su voz, consolarlo de alguna forma, aunque fuese en la distancia y que él actuará igual respecto a ella y lo que estaba pasando. Siempre estaba preocupada por él, pero él... a veces tenía sus dudas respecto a lo que él realmente sentía por ella, y últimamente le resultaban cada vez mayores.

______ Stefan... Yo...___ por un instante su mente se quedó en blanco, al menos hasta que pudo hilar una frase coherente, que no sonara para nada como se sentía, quería ser amable, quería ser comprensiva, tendría muchas razones para no haberla contactado antes, pero... Aún así después de semanas sin atender siquiera un mísero mensaje, o intentar de alguna forma hacerle saber que estaba bien y a salvo, Stefan debería saber o al menos suponer que no era precisamente alegría lo que encontraría esa milagrosa mañana en qué decidió que era momento de dar alguna señal de vida y sus siguientes palabras solo la hicieron reafirmar el hecho que lo último que sentía era alegría o preocupación, ¡ demonios, ella estaba muy enfadada!.