Tangled Time (Finalizada)

Capítulo 10

Desde la conversación con All Might, Midoriya y Bakugou apenas han intercambiado palabras más allá de estar los cuatro juntos.

Bakugou está huraño, malhumorado, solitario. No solo Midoriya se ha dado cuenta de su cambio de humor, Mahoro y Katsuma también por esa razón han tenido otra nueva idea.

Midoriya no ha protestado ni los ha hecho cambiar de opinión al encontrarse las dos camas juntas. Los pequeños quieren dormir con sus padres todos juntos como lo hacen en casa. Reír, jugar, ver algo en la televisión y despertar acunados en la calidez de ambos. ¿Cómo va a aplacar la emoción de los niños por necesitar el amor de sus padres? Entiende cómo puede sentirse Bakugou tras enterarse de que no solo puede utilizar la superfuerza, sino también otros quirks. No le había visto llorar desde la pelea que mantuvieron cuando él creía que había provocado la caída del número uno al haber sido secuestrado por la liga de villanos. Esa noche, esa pelea, el haberse sincerado el uno con el otro había marcado un antes y un después en una relación que se abría paso entre el los escombros del muro que empezaba a caer.

Le gustaría poder hablar con él. Tener una conversación serena, calmada pero ¿Será capaz de ello? Él también tiene mucho que decir, mucho que callar, y sobre todo, mucho que digerir. De pasar a ser un sin quirk a tener varios... ¿Cómo puede aceptarlo tan fácilmente cuando ahora mismo su máximo preocupación era cerciorarse de algo nuevo que ha nacido en su interior?

Apenas presta atención a la película que se proyecta en la televisión. Mahoro y Katsuma cayeron rendidos hace rato y justo cuando Midoriya parecía ser vencido por el mismo que ha arrastrado a los niños al mundo de los sueños se escucha el chasquido de la puerta abrirse. No es necesario mirar a Bakugou para darse cuenta de que ha bebido. El olor a alcohol le delatan.

Se ha dado cuenta de que las camas están juntas pero no dice nada. Murmura algo de tomarse un baño y va directo al baño. Nada más entrar tras llamar a la puerta, Midoriya cree que ha regresado a los oscuros días del colegio nada más ver la oscura mirada de Bakugou reflejada en el espejo observándole. Nota un nudo en la garganta, los recuerdos de ser maltratado se proyectan en pantalla grande en su cabeza. Quiere salir. Huir. Pero si lo hace, si no hace frente a aquel que lo mira con tanto odio, no podrán seguir caminando juntos.

-¿Dónde has estado? – logra preguntar cerrando la puerta tras él.

-No es asunto tuyo.

Responde secamente. Empieza a desvestirse lanzando la camiseta sobre el rostro de Midoriya. No solo huele a alcohol. Hay otros olores que le dan ganas de vomitar.

-Hueles a omegas.

-Y tú a otros alfas.

Bakugou lo acorrala apoyando sus manos en la pared. Vuelve a repetir que huele a alfa olisqueándole el cuello. ¿Te has divertido con ellos, maldito nerd? ¿Te has dado un buen revolcón pensando en mí? Susurra lamiéndole. Midoriya deja caer que está borracho y que no ha hecho nada de lo que él se piensa, que las feromonas de alfas y omegas están por todas partes adhiriéndose a sus ropas, pero que él bien podría haberlo hecho. Después le aparta con fuerza encontrándose de nuevo con ese pasado.

"Es la misma mirada de aquellos días"

Piensan ambos.

Miedo.

Desprecio.

Le da la espalda y le pide que se largue, pero Midoriya no va a obedecer. Necesitan hablar.

-¿Por qué estás tan enfadado? – solo obtiene un gruñido mientras se desviste de cintura para abajo quedándose solo en ropa interior - ¿Es por lo que nos ha contado All Might? – se frota las manos nervioso - Para mí también es difícil y complicado entenderlo pero –