24. Corazón roto

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Al día siguiente, lo pase muy mal. Me leí todos los libros de amor que tenía, para seguir en mi fantasía de amor perfecto, el que pensaba que alguna vez tuve.

Para almorzar, pedí piza, en total tres porciones de distintos sabores, el repartidor se sorprendió al saber que era solo para mí. Una mujer bajita con orejeras, con el cabello despeinado y ganas de vivir, nulas.

Las pizas me gustaron mucho. Me desahogue comiéndolas, aunque después me cayeron mal y termine vomitando.

Debería de hablar con alguien del tema pero no me apetecía, ya había llorado lo suficiente el viernes. No dejaba de pensar en Phoenix y como estaría ahora.

¿Estaría igual que yo? ¿Estaría afrontando la situación mejor? O ¿estaría hablando con Connor, para ocultarme información? Seguía decepcionada y enojada.

Podría hablar con Connor, pero no me parecía buena idea. Aparentemente conoce a Doe pero no estoy segura de dónde lo conoce. También no me entraba ninguna suposición de cómo se enteró de lo que sucedía.

Quizás se lo había contado Phoenix, sin embargo deseo que esa teoría no sea cierta y sea simplemente imaginación mía. Me decepcionaría más del hombre, el cual entregue mi corazón por primera vez.

Estaba acostado en el sofá, pensando que podría hacer cuando tocaron la puerta, supe de quien se trataba por los gritos de reproche.

-DAYLIN, ¡¿Por qué no contestas mis llamadas?!-era Paris.

Suspire, y aunque en ese preciso momento quería seguir divagando, le abrí a mí me mejor amiga.

-Tengo mi teléfono en silencio-le dije, al tan solo abrirle la puerta.

-¿Qué mierda te paso?-pregunto, muy preocupada.

-No me veo, tan mal-si mi veía mal, lo sabía mejor que nadie.

-Tu cabello esta horrible, por primera vez no le tengo envidia.

-Gracias.

-Tienes unas orejeras marcadas...tu blusa amarilla esta manchada de salsa y tu pijama rosado pastel, no combina en nada-destaco cada cosa que tenía, llegando a molestarme.

-¡Sé que estoy mal!...no tienes que recordármelo.

-Lo siento-dijo, para luego decir-Te he estado llamando para contarte de todo lo que me paso nuevo esta semana, como no habíamos hablado.

-Si es verdad. En mi caso no fue mi mejor semana.

-Ya veo, creo que tendría que entrar a tu apartamento y hablamos de lo que te paso.

-Mi apartamento esta desordenado-olía a piza por todos lados, no era el lugar ideal para tener una charla.

-Entonces ¿vamos a mi apartamento?-pregunto ella. –A mí me gustaría-mi apartamento ahora mismo, me traía muchos recuerdos. –Ok, pero tráete más ropa que cuando estés en mi amado hogar, te iras directamente a la bañera.

Efectivamente eso paso. Logre despejarme en la ducha y pensar con claridad, también tener ropa limpia ayudo, creo que limpiare mi apartamento al volver. El olor a vainilla del apartamento de Paris me alegraba bastante.

-¿Estas mejor?-pregunto al verme entrar a la sala de estar.

-No es mi mejor día... pero estoy mejor que hace una ahora.

-Genial-exclamo ella.

Me senté al lado de ella. Estaba sentada en suelo viendo Grey's Anatomy, era la serie favorita de Paris, yo había visto uno que otro episodio, no me llamaba mucho la atención.

Cercano y Distante (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora