🍇 ⇢ 𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 83.

423 49 68
                                    

Adiós, Danganronpa - Parte 1.

───── ❝ 🍇 ❞ ─────

Oh, tengo que presentarme primero.

Me llamo Makoto.

No tengo ningún talento ni nada del estilo. Soy un adolescente normal.

Esta persona aburrida soy yo... ¿Ven? Soy lo más normal que existe.

Haber entrado en un instituto de élite como éste sólo fue el inicio de mi mala suerte. No soy capaz de hablar con mis compañeros ni entender las clases de los profesores...

Me tratan como un hueco vacío en medio del aula.

En mi casa, mis padres están siempre encima de mí... La verdad es que estoy harto... Quiero huir de mi vida hasta ahora...

Huir y olvidar todo esto...

Huir y huir y huir y huir y huir...

¡Pero no pasa nada! ¡Tengo una razón por la que vivir! ¡Algo con lo que divertirme! ¡Por lo que no pasa nada!

¡Gracias por darme agallas!

¡Gracias por darme algo con lo que pueda obsesionarme! ¡Gracias por darme la fuerza para poder seguir viviendo!

¡Los seguiré animando! ¡Así que sigan así!

¡Y un día...!

¡Y un día, yo también...!

Un estruendo perforó sus oídos haciendo que se alertaran.

Pero no fue sufiente, más y más más estruendos acompañados del piso temblando constantemente provocó un grito abrumador por parte de Tsumugi, lo que los obligaron a ponerse en posición de defensa.

- ¡¿Qué está pasando?! - exclamó Shuichi, haciendo que Himiko apuntara rápidamente al gran instituto a pasos de ellos.

- ¡El edificio está explotando! ¡¿Q-Qué ocurre?!

- ¡Hey, miren eso!

Todos giraron la vista hacia donde apuntaba Maki.

Se quedaron estupefactos.

Era Kiibo quien a grandes metros lejos de suelo se suspendía en el aire mirando el terreno con atención. Su mirada se posó durante unos segundos en sus compañeros, quienes lo miraban sin entender sus acciones.

Sin embargo, eso no fue sufiente para detener sus ataques. Se impulsó con una velocidad que les fue difícil percibir destrozando todo a su paso.

- ¡¿Kiibo-Kun?! - exclamó el detective con sorpresa.

- ¡¿Qué estás haciendo, Kiibo-Kun?!

Sus preguntas fueron un desperdicio de aire en vano, pues Kiibo no planeaba pararse a hablar con ellos.

- ¡Está volando! ¡¿Es magia?! - exclamó Himiko encantada.

- No sé qué estará pensando, pero está atacando el edificio indiscriminadamente. - suspiró Maki mientras sus nervios eran reflejados con una gota de sudor recorriendo su frente. - Tenemos que detenerlo... Antes de que sea demasiado tarde.

- ¿Cómo podemos pararlo? - preguntó Tsumugi inmediatamente, tratando de mantener la calma.

- No lo sé, pero tendremos que buscar una solución rápido. - habló Mirai acelerado.

❝𝐂Ó𝐌𝐏𝐋𝐈𝐂𝐄❞ ⸻ 𝐎𝐮𝐦𝐚 𝐊𝐨𝐤𝐢𝐜𝐡𝐢 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora