[💫];; ¡Hola a todos! Sólo vengo a aclarar que a la hora de investigar cometí un error con una de las pruebas, entonces, para que no se confundan en este capítulo: En realidad Kokichi tiene un solo agujero en su chaqueta, en al espalda.
Sin más, ¡Disfruten de la lectura!
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- Los únicos que podrían haber pedido una ballesta para el hangar eran Momota-Kun u Ouma-Kun. - apuntó Shuichi. - Y Momota-Kun sabía como montarlo, así que podría haber sido él. Siendo así... No se me ocurre nadie más que haya podido ser.
- No creo que Yumeno-San hiciera caso a una orden de Ouma-Kun... - habló Kiibo rodando los ojos con obviedad.
- ¡Claro que no! ¿Por qué le haría favores a Ouma? - exclamó indignada.
- ¡Porque me quieres! - respondió el Exisal.
- ¡No! ¡Te odio!
- Pero yo sí te quiero a ti.
- ¡¿Nhaa?!
- ¡Hey! ¡No juegues con el corazón de Yumeno-San! - detuvo Tsumugi.
A todo esto, el detective ignoró la discusión, concluyendo que ante todas las pruebas frente a él, probablemente Kaito había cumplido su promesa la otra noche.
- ¿Y por qué nos lo estabas ocultado, Yumeno-San? - Kiibo cambió de tema rápidamente.
- Momota me dijo que lo mantuviera en secreto... - murmuró con la mirada perdida. - Y al morir Momota, me asusté. Pensé que yo sería la siguiente.
- ¡Y tuviste que acusar a Harukawa-Chan por esa tontería! - le recriminó el Exisal. - ¡Harukawa-Chan, enséñale a esta pintamonas lo que es el verdadero terror que puede sentir un humano!
- ¡Hey, no acoses a la persona que quieres! - apuntó Himiko.
- Esto va un poco más allá del acoso... - murmuró Tsumugi.
- ¿Y cuánto te dijo Momota-Kun todo esto, Yumeno-San? - preguntó Shuichi.
- Eh... Ayer por la noche, más o menos. - trató de recordar. - Estaba tan nerviosa sobre la lucha contra Ouma que apenas pude pegar un ojo... Así que me di una vuelta por el hangar y ahí fue cuando Momota me llamó. Me entró el miedo en ese momento, pero después me dijo que le trajera una ballesta.
- Eh... No voy a preguntar mucho sobre ese miedo y eso... Pero que Momota-Kun te pidiera una ballesta podría significar que quería matar a Ouma-Kun. - interrumpió Tsumugi pensativa.
