¡Corte! [AU - Spruan]

❧. L. Principio del fin

Lo que estaba por llegar era un episodio extra, así como lo fueron los especiales presentando el arco del viaje dimensional de Juan. Era algo importante para él ya que establecería el principio del fin para su personaje. Tuvieron algunos inconvenientes con las fechas debido a que uno de los actores invitados se enfermó días antes, pero por suerte ya se estaba recuperando y no afectaría mucho a la planificación.

Al menos eso por el lado laboral, pero a nivel personal, Juan y Spreen estaban un poco (muy) estresados con la fecha de su boda ya cerca. Si bien consideraron aplazarlo, ya sería la segunda vez y no sabían si el lugar que habían reservado les aceptaría otro cambio. Todo se complicó dado que el final de la serie se adelantó y eso coincidió con sus agendas ya copadas.

Con eso, Juan no pudo evitar sentirse un poco desconcentrado durante algunas tomas ya que no dejaba de pensar en eso. Si lo movemos un mes más podríamos tomar la única fecha disponible, pero no sé si mis padres ya reservaron su vuelo, además del servicio de catering preparado...Todo era un lío.

– ¡Juan! –

– ¿Eh? ¿Qué pasa? –

– Te toca entrar a escena. – Comentó Elisa, mientras aún se secaba el cabello. Los efectos que usaron para el especial navideño fueron alucinantes. – ¿Pasó algo? No me digas que volvieron a pelear porque sino...

– No, no. No es eso, todo está- – Pero por la mirada que le dio la pelirroja, era obvio que no iba a creerle. – Estamos bien, pero un poco estresados. –

– ¿Por el trabajo? –

– Quisiera que fuera por eso. –

No pudo evitar sentir que era su culpa.

Para Spreen, el sentimiento era el mismo. Estuvo tan concentrado en la mudanza y solucionar todo el problema con sus viejos que no pudo revisar bien las fechas. Incluso ahora estaba viendo la forma de decirle a Juan que había perdido su cita con el sastre y aún no tenía la prueba del traje.

Esperaba resolverlo pronto.

Justo en ese momento, les tocaba grabar a los dos.

Libro ¡Escena 2, toma 4, plano 2. Acción!

Spreen se encontraba en una zona lejana debido a la construcción de su estadio y, debido a eso, Juan tuvo que llegar hasta ahí para recuperar su libro que había usado cuando abrió el portal a la otra dimensión.

– Hola capo. –

– Hola. – Y aunque intentó sonar lo más tranquilo que pudo, no funcionó.

– Che ¿Por qué estás solo en medio de las praderas? –

– Porque no tengo ni puta idea de donde estoy. – Respondió. – Todo me está saliendo mal y agradecería si me das mi libro para irme de una vez. –

– Pero pará ¿tenés cohetes? –

– Solo unos cuantos. –

– Estás regaladísimo, no tienes forma de irte y estamos en medio de la nada. – Juan levantó una ceja, confundido.

– ¿Y? –

Bueno, Spreen hizo lo único que podía hacer, intentar animar a su novio. Se agachó un poco, se quitó los lentes y sonrió.

– Esto es un secuestro maestro. – Le guiñó el ojo.

Y Juan no pudo evitar reír por aquella tontería. Spreen suspiró, más tranquilo de escuchar aquella risa tan característica del mayor.

– Sería lo último que me faltaba. –

¡Corte!

Para su sorpresa, la toma quedó, pero cortarían ese último guiño.

Siguieron con las escenas, la presentación del estadio a otros miembros de tortilla y al final una visita al santuario para volver a molestar a Juan.

Al final del día, Spreen se encargó de hablar con el otro.

– Estás molesto. – Dijo sin más.

– ¿Qué? No lo estoy. –

– Molesto, preocupado, como querés llamarlo. – Aclaró. – ¿Seguís pensando en la boda? –

Juan suspiró, un poco reacio a responder, pero al final asintió.

– Ya te dije, podemos manejarlo, si movemos unas cosas al fin de semana tendremos todo en orden de nuevo. –

– Pero aún hay cosas que seguimos revisando. Entre las grabaciones y otras reuniones, me preocupa que no nos dé el tiempo y estemos cambiando la fecha, otra vez. –

– No pasará eso ¿Está bien? – Spreen sonrió. – Vas a ver que podremos grabar el final, buscarotrosastre, cerrar las entrevistas, casarnos y salir vivos de todo eso. –

– Lo dices como si pudiéramos hacer todo eso en tres días. –

– No lo veo imposible. – Y Juan solo pude darle un golpe en el brazo, pero Spreen sabía que ya estaba más tranquilo. – ¿Mejor? –

– Gracias. – Sonrió. – ¿Vamos a casa? –

– Vamos. –

Sin embargo, cuando estaban recogiendo sus cosas, Juan cayó en cuenta de algo importante. – Espera ¿Cómo que buscar otro sastre? ¿Aún no te has probado el traje? –

– Pero mirá lo tarde que es ¡Nos vemos! – Y Spreen se fue corriendo al estacionamiento.

– ¡Spreen! ¡Vuelve aquí! –

Quien los viera pensaría que era otra pelea de pareja, y así era, pero al menos podían manejarlo. 

~*~

Algo bonito para cerrar esta pequeña actu, porque se viene momento Dioses del todo y el final que ya todos conocemos :') </3 [Junto con un pequeño extra 💖].