¡Corte! [AU - Spruan]

❧ VIII. Revista del día

A lo lejos, Mayichi se preguntó cuál de todas las escenas se mantendrían al momento de editar el episodio. Sabía que en un punto Auron solo los dejaría ser y eso le daría más vía libre a Spreen, y quizás a Juan, de seguir con ese juego entre ambos.

Ya esperaba leer las teorías de los fans cuando estrenaran la primera parte de esa segunda temporada.

– ¿Cuánto a que le reducen las tomas juntos? – Mayichi volteó para encontrar a Ari a su lado. Ella era otra de las que sabía sobre su relación y por eso también le parecía entretenido lo que estaba pasando. –

– Es más probable que hasta luego de la escena de la pelea. –

Ari asintió. – Y me decía que ya no se ponía nervioso. – se burló. – ¿Crees que a la gente le importe? –

– Al menos les dará más material. – 

Así pasaron los días mientras iban concretando la primera parte de la temporada. Esta se iba a estrenar pronto y luego tendrían una semana de descanso antes de comenzar con la segunda por lo que tenían que cumplir con los tiempos acordados. Las cosas iban avanzando relativamente bien, como cada grabación, con sus percances y contratiempos...unos más comunes que otros.

El personaje de Spreen estaba a punto de inaugurar su pollería y en ese momento se encontraba repartiendo las invitaciones al gran día. Ya habían integrado su trabajo en la editorial por lo que la revista se volvería algo recurrente en sus líneas.

– Revista semanal. –

Mayichi no pudo contener la risa al ver la imagen. – ¿Es en serio? –

– Sí, nos vemos. –

Pocos sabían cómo era esa primera portada.

Así Spreen fue "repartiendo" las invitaciones entre los demás miembros del pueblo. Por ahí mostró ligeros spoilers como "La rascada del siglo" planeada por Ibai, Ampeter y Perxxita o el avance de la tienda de Tanizen y Noni. Pero ya se mostrarían en los episodios simultáneos.

Invitaciones ¡Escena 8, plano 2, toma 1. Acción!

– Hola mago. – Saludó cuando llegó hasta donde sería el santuario de Juan. – Te traigo una invitación a la inauguración de mañana. –

– ¿Mañana ya abres? – preguntó el de gafas, mientras leía la tarjeta. – Oye muchas gracias. –

– De nada, está muy bueno el lugar por cierto. – Dijo, señalando alrededor. – Está linda la granja. –

– Sí, pero no es... –

– Pero más lindo vos. –

Juan iba a matarlo, es más, esa noche iba hacer que durmiera en el sofá. Con un suspiro, aprovechó esos segundos de silencio donde bien podrían cortar la escena y decidió continuar.

– Gracias, pero no es una granja. Es el lugar donde será mi santuario mágico. –

– ¿Entonces podés traer animales de otro universo? Piola. –

– Sí y no, yo- –

– ¿Y podés revivir animales ya extintos? Tendrían bastante espacio en tu santuario de animales. –

– Por última vez no es de animales, es un santuario mágico. –

Era sorprendente cómo ese tipo de discusiones podían salir bastante natural en ambos. A Juan le recordaba a esas primeras veces donde les tocó trabajar juntos.

Lo estaba llevando a la salida del santuario, pero Spreen lo detuvo – Por cierto ¿Ya viste la revista semanal? –

– No ¿Cuál revista? –

Spreen le alcanzó una y Juan solo se quedó callado al ver la portada. Precisamente, por ver quién aparecía en ella.

– ¡CORTE! – pero esta vez, Auron no fue quién gritó. –¿Quién aprobó esta portada? ¿Cuándo tuviste esta sesión? – Le reclamó al más alto agitando la revista.

– Juan no podés cortar así la escena. – Se burló Spreen.

– Me vale verga ¿Cuándo pasó esto? –

– ¿Recuerdas cuando tuve que salir más temprano hace una semana? Fue por esto, Biyin dijo que era una buena idea. –

La rubia, quien se encontraba detrás de cámaras, asintió de forma tranquila. – La encuesta dice que podría aumentar el rating. –

– Que me coma los huevos la encuesta. – refunfuño el mayor.

Spreen solo pudo reír al ver el puchero que estaba haciendo su novio. – Relájate boludo, igual la portada cambiará en los próximos episodios. –

– ¿Seguro? – Preguntó Juan.

– ¡Depende! –

– ¡Biyin! –

– ¿Podemos seguir grabando por favor? – Exclamó Auron. – Sí Juan, el plan es que luego la revista sea Tortillanews así que deja de quejarte. Ni que fuera la primera vez que lo ven semidesnudo. –

– ¡Chinga tu madre, Auron! –

Si supiera cómo saldrán en la conferencia de la velada – Pensó Biyin, pero lo mejor era si no les decía. 

~*~