You Wanna Piece Of Me

𝐌꒰ 19

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Había pasado una semana ya... Su colega jamás volvió a tocar el tema desde aquella noche, pero el sabía que en cualquier momento podría usarlo en su contra, se llevaban bien pero uno no sabría que podría pasar.

— ¿En qué piensas?

Soobin detuvo su cena para poder centrar su atención hacia su esposa.

— ¿No te da curiosidad de saber en dónde estará Yeonjun? — mentiría si el en ése momento negaba la curiosidad que sentía ante ello.

— No, ¿Por qué? Ya no es más nuestra responsabilidad.

La fémina se puso de pie para recoger su plato junto al de los dos menores quienes ya se habían levantado de la mesa.

— Mía ya no pero tuya si, Sunhee. Yeonjun aquí y mañana, siempre va a ser tu responsabilidad.

— ¿Si? Pues ya no lo es, ya no está con nosotros.

— ¿Nosotros? Siempre es un "nosotros". Te recuerdo que Yeonjun es tu hijo.

— ¿Lo ves aquí? Porque yo no, simplemente ya no está aquí, ya no es nuestra carga.

— ¡Carajo, Sunhee! — se colocó de pie golpeando la mesa. — ¡¿Por qué siempre es lo mismo?! Nuestro, nosotros, ambos, cuando en realidad desde que empezamos quién vió por ése niño, ¡Siempre fuí yo!

— ¡¿Y que con eso?! — finalmente se había acercado hasta su esposo gritando también. — ¡¿Cuál es tu maldito problema?! ¡Jamás quise a Yeonjun y te lo dije! Pero fué tu maldito corazón el que le tuvo compasión al ser "solo un niño".

— ¡Era un niño, Sunhee! No puedo creer que seas la madre de mis hijos cuando tratas así a tu primogénito. — salió de la cocina luego de haber dicho lo último, no tenía más que decir pero si el adolecente actuaba de esa manera era porque la mayoría de sus traumas eran en base a su madre.

— ¡¿A dónde vas?!

— No te debe de importar.

— Por supuesto que me importa, ¡Eres mi esposo!

Soobin se detuvo regresando con ella al notar que estaba siendo perseguido.

— ¿Y tú hijo?... ¿Desde cuándo un hombre es más grande que el amor maternal?

— Yo por supuesto que amo a mis hijos pero es que Yeonjun...

Soobin esperó a la respuesta de la mujer pero en visto de que ella no diría nada, solo se apartó y terminó por salir de la casa. Entendía que no se llevaran bien ahora, la adolescencia era una etapa complicada y confusa pero es que, desde que él había empezado a vivir con ella, los tratos jamás fueron normales.

Habían cientos y cientos de recuerdos sobre Yeonjun, pero en cada uno de esos recuerdos el chico siempre terminaba yéndose con un castigo o con un golpe.

Un respiro era lo que el necesitaba, el último mes había sido un cambio total para él, pero no pensó que lo iría a afectar de sobre manera. Necesitaba darle una lección a Yeonjun pero el chico fuera de él, no tenía a nadie.