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¿Cómo es San Valentín para la familia AleCan?

Alemania y Canadá.

El alemán preparaba el desayuno de forma rápida pero precisa, no faltaba mucho para que Canadá despertara y queria sorprenderlo con algo especial, sabía que el 14 de febrero solo era mercadotecnia, lo sabía perfectamente, pero también le gustaba usar cualquier fecha como pretexto para hacer cosas por su esposo y comprarle cosas sin que esté le dijera que estaba siendo excesivo.

Apagó la estufa y sirvió el omelette de huevo que estaba preparando, colocando el plato en la charola tipo mesita que tenían. Sirvió jugo de fresas, unos panqueques y un poco de sirope de maple y mantequilla en unos mini refractarios que tenía.

Colocó un florero pequeño con unas cuantas margaritas y tomo finalmente la bandeja para poder ir a su habitación, sus hijos aún dormían por lo que podía ver.

Abrió con cuidado la puerta y vio al pelirrojo aún dormido, así que dejó la bandeja en el tocador y se acercó a la cama y comenzó a acariciar el cabello rizado al tiempo de repartía besos en la mejilla del bicolor.

— Buenos días, amor, es hora de despertar — dijo bajito con tono meloso, sonriendo cuando sintió que la respiración de Canadá se interrumpía y cambiaban de ritmo.

— Buenos... Días... — respondió Canadá, abriendo los ojos y comenzando a despabilarse.

Alemania le dio un beso en el cabello y se separo para ir por la bandeja, mientras tanto Canadá se estiró y, al ver a Alemania acercarse con la bandeja, se sentó para recibirla.

— Awwww, me trajiste el desayuno, muchas gracias — dijo enternecido el mayor.

— Y lo haré con tal de ver el brillo en tus ojos — respondió Alemania.

Antes de comenzar a comer, Canadá se estiró para abrir el cajón de su mesita de noche y darle una caja pequeña a Alemania, quién la abrió y vio dentro de está una cadena de plata.

— Can...

— La vi y de inmediato pensé en ti — Canadá dejo a un lado la bandeja y fue a sentarse al regazo de Alemania, en lo que esté veía que la cadena tenía un grabado sobre una plaquita.

"El amor de mi vida siempre serás tú"

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Viveka (27 años)

— Muy bien Molly, hora de quitar el decolorante — dijo la pelirroja ayudado a su amiga a levantarse de la silla giratoria.

Al ser un día laboral, Viveka había acudido cómo normalmente hacia a la estética donde trabajaba, pero al estar algo muerto el día se había puesto a cambiarle el look a su amiga/jefa.

— Ya era hora, temí tener que pasar por una tercera decoloración — dijo con alivio la humana con cabello castaño oscuro.

— Nah, eso solo le pasó a Fritzy cuando me dejó jugar con su cabello... Aunque no le digas, el piensa que es un sueño aunque solo fui yo aprovechandome de lo narcotizado que estaba — la aleman-canadiense comenzó a templar el agua del lavadero en lo que Molly de sentaba.

— Cierto, que tú hermano tiene el cabello negro cuál carbón... ¿Hará algo por san Valentín?

— No lo sé, no me dijo nada a mi y...

La campanilla de la puerta sonó mientras alguien entraba, ambas mujeres miraron a esta y vieron a un hombre con un gran arreglo floral entrar, parecía bastante estorbosos.

— Eh... Busco a... Viveka Elizabeth Strauß-Trembley — dijo una voz masculina.

— Eh... Soy yo — dijo extrañada la mencionada, acercándose al hombre.

Entre Waffles y Salchichas || CountryHumans AleCanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora