𝐏𝐫𝐢́𝐧𝐜𝐢𝐩𝐞 𝐝𝐞 𝐃𝐚𝐞𝐠𝐮. [𝐁𝐞𝐨𝐦𝐇𝐲𝐮𝐧]

Twenty three.

Un mes después.

—¿Decidiste casarte al fin con BeomGyu? —Preguntó Sakura con emoción—. Ya era hora, yo sabía que te ibas a dar cuenta de que él era el indicado y te ibas a enamorar. Es que yo lo sabía, yo lo presentí.

—Si, si, bueno ya cálmate, ¿no? —Dijo TaeHyun—. Todavía estamos en proceso. Ni siquiera me lo ha pedido como se debe.

Sakura iba a decir algo, pero se cayó la boca ella misma con su mano.

—¿Y ahora a ti qué te picó? —Preguntó TaeHyun—.

Sakura negó con su cabeza rápidamente.

—Aún no entiendo porque somos hermanos. —Dijo TaeHyun—. Me tengo que ir, tengo que ir a que me quiten las vendas, dijeron que ya estoy bien.

Sakura asintió aún con su boca tapada.

—Bien... —Dijo un extrañado TaeHyun—. Nos vemos después.

TaeHyun salió del cuarto algo extrañado con la actitud de su hermana. Cerró la puerta y Sakura pudo respirar otra vez.

Casi se le salía.

Dos semanas antes.

—¿Me mandaste a llamar? —Preguntó Sakura, asomando su cabeza en recamara de BeomGyu—.

—Si, pasa. —Dijo—.

Sakura entró y cerró la puerta para acercarse y sentarse en la orilla de la cama de su hermano.

—¿Y? ¿Qué es lo qué sucede? —Habló Sakura—.

BeomGyu se levantó de la silla en la que estaba sentado y sacó una caja de su bolsillo del pantalón y se la enseñó.

Sakura tomó la caja y la abrió, dejando ver un anillo con un diamante muy brillante incrustado en el. Sus ojos se abrieron demasiado, hasta pareciera que iban a salirse.

—¿Un anillo?

BeomGyu asintió:—Decidí pedirle matrimonio a TaeHyun. Como se merece.

Sakura no pudo evitar gritar por la noticia. Estaba tan feliz de que BeomGyu decidiera pedirle matrimonio como es debido a su hermanito.

—¿Cuándo planeas decirle? —Preguntó Sakura con emoción—. ¿Mañana? ¿Pasado mañana? ¿En tres días? ¿En cuatro? ¿Cinco?

BeomGyu negó:—Tengo que planear algo antes... Pero lo que quiero es muy complicado y laborioso...

—¿Vas a hacer algo solamente para él?

BeomGyu asintió:—Quiero que sea especial. Que sea un momento que sólo nosotros dos estemos presentes, los demás pueden esperar hasta el día de la boda. Si es que él me dice que si.

—Lo hará... Creo que, desde que lo salvaste aquel día, se acercó un poco más a ti y abrió un poco ese corazón tan frío que tenía. —Dijo su hermana—. Te tengo que dar las gracias...

—¿Por qué?

—Por querer a mi hermano. —Respondió ella—.

—Ay, no es para tanto... Además, no solamente lo quiero, lo amo. —Sonrió atontado—.

—¿Tú sabes cuántas personas han hecho sentir menos a TaeHyun por su forma de ser? —Lo miró—. ¿Tú sabes lo mucho qué fingió el qué no le importen las opiniones ajenas? ¿Sabes las veces qué lloró? Tú lo conociste en la etapa donde no le importaba nada, solamente él mismo, pero antes... Antes era una persona totalmente distinta a la que es ahora.

BeomGyu sintió un poco de orgullo por eso. Sentía que era el primer amor sano de TaeHyun y la primera persona que lo había hecho sentir especial en mucho tiempo.

Y aunque al principio se sentía un poco mal por los comentarios de TaeHyun, poco a poco se fue acostumbrando a lo que TaeHyun era.

Sin darse cuenta que había encendido una chispa en el interior de TaeHyun que lo haría quedarse y ser parte de su vida, como BeomGyu quería desde un inicio.

TaeHyun había buscado un hogar en BeomGyu sin darse cuenta.