Capítulo: 5

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Ya era lunes y Jordan iba vestido con un elegante traje negro, se hecho un último vistazo al espejo y acomodo su cabello

6:30 am, iba a la mitad del camino en bus que lo dejaba a cinco cuadras del edificio donde comenzaría lo que aún no tenía idea "el infierno"

Adison Collins

—Tengo que hayar una forma de acercarme a Mancinelli ¡ayúdame! Pide la pelinegra a su mejor amigo –¡Ya te dije que no! Es lo mismo que un limpiador público quiera y trate de ser presidente, Responde Sam (oficial de policia)
—Tienes que ayudarme, no conozco a nadie más con acceso a organizaciones, o pandillas ¡por favor!

—Si te ayudo a unirte a uno de esas "pandillas" me hará quedar mal, entiende, Olvidate de eso, Mancinelli no se acuerda de ti y si le haces frente tendrás problemas y por lo que se el es un hombre bastante peligroso y si te cruzas en su camino muy mal, te aniquilara. Confiesa Sam

—Bueno, entiendo que no quieras meterte en problemas asique no te arriesgare, haré esto sola. Dice retirandose de la oficina —¡Eso me asusta más! Grita el moreno para que su joven amiga lo escuche.

STRADA

Jordan no tenía idea de lo que tenía que hacer allí, lo cual era estupido ya que no puedes ingresar a un nuevo empleo sin estar bien informado de los labores que debería ejecutar, pero claramente este no era cualquier trabajo, si se trataba de una de las mafias más poderosas de EE.UU , Europa y Asia.

—Primero que nada iremos junto a Karen, la recepcionista, ya te di tu pase de empleado, al llegar aquí debes mostrarle ese carnet a Karen para que te anote, Explica Brook mostrándole el lugar —Ahora iremos junto al jefe, es necesario verlo para que sepa que ya llegaste y más si eres nuevo aquí. Jordan solo acentia a cada cosa que decía el pelirrojo, no quería hacer muchas preguntas ya que a medida que pase el tiempo ya sabrá como se manejan las cosas allí.

—Esperame aquí, iré a hablar con un colega, ya regreso. Avisa Brook dejando a Jordan en medio del pasillo, mientras el pelirojo charlaba con un compañero, de una de las puertas salió un chico peliazul que le parecía familiar a Jordan, tal chico de cabello azul cruzó mirada con el, lo sonreía de manera falsa y se le acercó

—Hola, soy Steve Haryson, ¡mucho gusto! Se presentó. Brook quien ya había acabado su charla, desvío su mirada hacia Jordan conversando con su acompañante —"Maldición"
—¡Jordan! Exclama el pelirojo
—Oye yo... ¿Te vi en algún lado? Pregunta el pelinegro dirigiéndose a Steve —Ah no, mmm no lo creo. Responde el contrario
—Bueno Steve debo llevar a Jordan junto al jefe. Interrumpe Brook
—Claro ¡Fue un gusto Jordan!
—Si, igualmente. Responde extrañado

—Llegamos, en este edificio este es el despacho del Señor Mancinelli. Explica Brook —Ah ¿tienen dos edificios? Pregunta Jordan más bien no recibió respuesta ya que ya habían entrado a la oficina.

—Jordan ¡bienvenido! Exclama el Jefe —Buenos días Señor —Hoy es tu primer día, espero que lo hagas bien —Daré mi mayor esfuerzo, Dice el pelinegro —Así se habla, Brook te mostrará tus quehaceres y como las debes desarrollar, ¡buena suerte! Exclama el mayor dándole una calada a su habano.

Ambos chicos se retiraron de la oficina y Brook lo llevó directo a su despacho.

—Y... ¿Qué es lo que tengo que...
—Escuchame bien, Lo interrumpe el pelirojo —Debes estar preparado para cada orden que tengas que ejecutar en el futuro. Aviso Brook, y el blanquecino se extraño aún más ¿qué es lo que estaba diciendo, que aún no entendía? —Eh... Claro yo- —Sígueme, te mostraré algo, Lo interrumpe de nuevo Brook yendo hacia la puerta siendo seguido por Jordan quien con algo de inseguridad avanzó hacia el.

Nort Moon Alley
Callejón Luna del norte

Iba caminando sin rumbo, esperando encontrarse con algún ladrónsuelo, claramente la atacaria al verla pero ella se defenderia antes evitando que la dañen, y así conseguir aliarse con alguna pandilla, aunque también sería estupido ya que ciertas pandillas no aceptan nuevos reclutas así como así, pero no tenía cabeza para pensar en algún plan, Maurizio Mancinelli iba avanzando con nuevos proyectos, si ella no se daba prisa ese hombre haria algo que pudiera hacerle lamentarlo de por vida, aunque no podía hacer mucho, solo tenía 22 años y una navaja Suiza, pero no pierde nada con intentarlo de todos modos si vida ya era un asco.

Seguía caminando hasta que se encontró con un chico que reconoció al instante

—¿James? Se preguntó Adie —¿qué haces por aquí? Le pregunta la pelinegra —Eso debería preguntartelo a ti ¿que hace una chica de 22 años sola por estos callejones? —¿Eso que importa? Responde poniendo sus manos en sus bolsillos —Bueno, estonces ya me voy. Se despide James —Espera. Lo detiene —No es que me importe, pero realmente me extraña, que haces por aquí . Dice Adie —Fui con unos amigos, solo eso —¿Tus amigos son pandilleros? Pregunta La pelinegra —¿No crees que ya eres muy curiosa?  —Entonces no debimos encontrarnos, ¿o tampoco te interesa que hago por aquí?

Ambos se quedaron en silencio, ninguno de los dos sabía como explicarse, tampoco podían dejarlo así, ya que se verían al día siguiente y tarde o temprano charlarian del tema

—Si, una pandilla grande y reconocida "Sureños" mafia Mexicana —Cielos, no sabía que este chico tan elegante sea miembro de la Mafia Sureña
—No soy miembro, solo tengo amigos allí —es lo mismo, además ¿como puedes tener amigos allí? Los mexicanos te matarían
—No, mi padre perteneció a esta mafia, era muy fiel a su organización que murió por ella, es por eso que no me hacen nada, aún —¡De un día para otro sorprendes chico! Exclama Airi de brazos cruzados
—¿Y tú? Dime porque estas aquí, sabes que si te topas con uno de los miembros de "Sureños" tendrás problemas —Yo... Adie iba a contestar hasta que se le vino una idea en la cabeza
—¡Puedes ayudarme! Exclama la pelinegra
—¿Perdón? Se extraño el castaño —Si, ah aliarme a los "Sureños" y así —Espera... ¿Porque mierda quieres hacer eso? ¡Vas a la universidad! Exclama el joven —Lo sabrás cuando me lleves junto a los "Sureños"
—Te van a matar si no tienes una buena escusa, Le advierte James —Lo se, ahora andando
—"¿Está chica no tiene miedo?" dejando ese pensamiento atrás, empezó a guiar a Adison a la guarida de la mafia sureña.

—¡Oye ¿que haces?! Pregunta Adison al sentir unas manos frías cerca de su rostro —Te cubro los ojos, si casualmente no logras conseguir unirte a los "Sureños" no conozcas el camino si quieres volver, explica —Idiota, si no consigo aliarme ellos me matarían, tu mismo lo dijiste
—Ah... Yo... Lo siento, tengo mi cabeza en otro lado —Pues deberás tener tu cabeza pegada a tu cuello si no la quieres perder de verdad
—¿Quieres ser seria por que te enfrentarás a una mafia poderosa? Bien pensado —Pues si.
Sin más charla, James le quito la venda a Adie y la guió de nuevo al camino.

𝐒𝐓𝐑𝐀𝐃𝐀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora