Jordan Miller, no creía que la vida era un infierno, pero todo comenzó cuando aquella noche cometió el maldito error de aceptar aquel llamativo pero nebuloso trabajo.
Adison Collins no descansará hasta destruir a Maurizio Mancinelli.
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Estaba en su habitación, acababa de salir de la ducha embuelto en un albornoz y con una toalla secaba su cabello mojado, se sentó en su cama y vio como Brook entraba a la habitación.
—Disculpa, había olvidado que tomabas un baño— Se disculpa el pelirrojo acercándose a su armario —¿Quién... Era esa chica? La que iba caminando por los pasillos— Se atreve a preguntar mientras miraba el suelo —Es, una nueva recluta— Afirma cerrando su armario para tirarse a la cama —Es muy agotador, solo vine a recostarme un rato— Dice Brook en un tono de cansancio.
—¿Cuál es tu trabajo exacto? A parte de ser un asesino— Pregunta Jordan volteando su mirada al pelirrojo quien disfrutaba de su cómoda cama con los ojos cerrados —Soy la mano derecha del Sr Mancinelli, asesino y experto en armas— Afirma con el mismo tono de voz de hace un rato.
—Cielos, mucho trabajo —Si, en fin, debo irme, a parte de encargarme de la operación también debo ver que hay con la nueva recluta, tal vez le diga a Luigi que se encargue de ella. Con eso último Brook salió de la habitación dejando a Jordan pensativo.
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—Tenemos que iniciar con el plan— Dice Adison sosteniendo su auricular que estaba colocado en su oído izquierdo —¿Estás loca? Debemos pensar bien, tienes que profundizarte en los planes de Mancinelli para ver que hacer— Responde el Manda más —Tengo muchas cosas en mi cabeza Manda más, casi todos mis planes tienen el 80% de probabilidad de resultar —Así es, no queremos el 80 sino el 100% Adison, no seas inmadura, o darás problemas a nuestra mafia— Dice el Manda más algo estresado, apenas iniciaban con la operación y está chica ya le estaba sacando nuevas canas.
—De acuerdo, seré paciente, seguiré con mi juego— Acepta Adison saliendo de su cuarto, al salir se encontró con un joven alto y mirada serena —Hola, soy Luigi— Se presenta con una pequeña sonrisa sincera —Vine para darte un recorrido pero, veo que saliste antes ¿A donde ibas?— Pregunto, bien recibió una mirada de desden —No te importa— Responde haciendo que Luigi la mirara extrañado —"¿Qué te pasa? ¿Olvidas que ahora son de la misma mafia?"— Alza la voz el Manda más, estaba apunto de volverse loco.
—Su odio la segara, Señor ella debe calmarse— Dice "Panda" uno de los encargados de la operación —Adison escuchame, trata de ser más amigable, si por tu arrogancia y odio este plan falla, Strada nos declarará una guerra, ¡entiende!— Eso fue suficiente para que Adison respirara hondo y sonriera ligero —Disculpa, iba con el Sr Mancinelli— Responde con una mirada brillante, como ojos de lobo a punto de atacar.
—Ah, podrá verlo más tarde, primero le mostraré toda la mansión— Dice Luigi yendo a paso lento siendo seguido por Adison, realmente debía controlar su impulso.
—Esta es la sala grande, aquí puedes pasar el rato, relajarte, charlar, aunque siendo franco no siempre hay tiempo para ello— Afirma Luigi mostrando el lugar.
—Está es la sala de reuniones, en total son 3, está es la principal, en la segunda planta hay otra, y en la quinta igual, aunque algunos grupos suelen tener reuniones en otros sectores de la mansión, cuando se trata de operaciones privadas— Adison prestaba total atención, al igual que el Manda más y todos allí en la oficina pendientes de todo lo dicho por el italiano.
