A donde sea

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A lo lejos pude escuchar el sonido del timbre recordandome que las clases aún no habían terminado. Bible también debió escucharlo porque nos separó despacio. Mi cara debía estar todo roja por llorar y a eso sumale lo avergonzado que me sentía.

—¿Te sientes mejor? —preguntó secandome los restos de lágrimas que aún quedaban en mi rostro.

—Creo que sí—me sentía más ligero.

Bible se paró y me tendio la mano para ayudarme.

—Vamos.

—¿A dónde?

—A donde sea.

—¿Y las clases?

—Escuche que los profesores de matemáticas y lengua estaban enfermos —ignore que supiera que asignatura me tocaba.

—Aún así, nos podríamos meter en problemas ya que no dijeron que no habría clases—Bible se encogió de hombros quitándole importancia.

—Detalles.

—Después de todo vas a ser una mala influencia.

—Tal vez—¿que manía tenía con esa palabra?

—¿Vienes?—me señaló la mano que me tendía. Quise detenerme a pensarlo, pero decidí solo vivir el momento ya me ocuparía de las consecuencias luego. Además si los profesores estaban enfermos nada malo iba a pasar.

Tomé su mano sin dudarlo. Recogimos la manta y emprendimos nuestra huida. Menos mal que había traído la mochila conmigo lo único que había olvidado fue la chaqueta, pero ya le mandaría un mensaje a Jeff para que me la guardara.

—¿Y a dónde iremos?—pregunté cuando ya nos alejabamos de la escuela.

—Cierra los ojos—me ordenó.

—¿Para qué?—con él todo era tan espontáneo.

—Solo confía en mi y cierralos—lo hice— ahora dime él primer lugar que se te pasa por la cabeza.

—El mar—pronuncie sin pensar.

—Bien pues iremos a ver el mar.

—Estas loco, está muy lejos de aquí.

—No exageres Biu a una dos horas por lo menos, no está tan lejos.

—Pero.

—No discutas, ¿quieres ir o no?

—Si, pero... —no me dejó terminar, tomó mi mano y empezamos a correr.

Luego de dos horas en bus llegamos. Cuando lo vi no me lo podía creer, ya no me acordaba de la última vez que había venido, parecía tan lejano. Había estado tan ocupado tratando de esconderme que terminé olvidando las cosas que solían gustarme de verdad.

—¿Te vas quedar ahí parado? —Bible tomó mi mano y empezó a correr por tercera vez.

Hacía frío, pero no nos importó. Nos quitamos los zapatos y corrimos por toda la arena, luego nos tiramos agua con los pies y entre risas el día fue pasando.

No se quien parecía más niño si él o yo.

Bible lucía tan libre como si viviera en un mundo totalmente diferente.

Siempre pensé que cada persona era un mundo distinto, todos teníamos nuestras propios problemas e inseguridades y cargábamos con diferentes pesos en nuestros hombros.

Sin embargo Bible parecía un alma libre de esas personas que vivían el ahora sin pensar en el después, sin ataduras y sin complicaciones.

Aunque sólo era la que yo veía en la superficie y no podía negar las fervientes ganas de conocerlo mejor, de descubrirlo, de saber que ocultaba detras de cada “tal vez", que crecían en mi interior.

Cuando ya nos cansamos de jugar, nos sentamos a apreciar el atardecer. No había nadie alrededor lo que era natural puesto que hacia un frío que heleba los huesos. Ahora que estaba quieto era que me daba cuenta, me encogí y abracé mis rodillas intentando guardar todo el calor que pudiera.

—¿Te divertiste?—me preguntó con la voz agitada.

—Mucho ¿podríamos repetir esto de nuevo? —dije algo nervioso.

—¿El qué? ¿Venir al mar?

—Si, bueno no—la lengua se me trababa y que estuviera mirándome tan fijamente no ayudaba con mis nervios—me refiero a salir a cualquier lugar.

—Claro ¿a dónde te gustaría ir mañana?

—Mañana—mencioné sorprendido de que fuera tan rápido.

—¿Si quieres?

—¡Quiero! —exclame más emocionado de que lo que debería, pero me olvide de la vergüenza cuando vi la sonrisa de Bible asomarse en su rostro.

—¿A donde te gustaría ir?

—A donde sea, esta vez es tu turno de elegir el lugar—Bible lo pensó un rato.

—El cine—hizo una pausa y me miro de la misma forma que lo hizo cuando me acarició la mejilla, como si quisiera decir algo con sus ojos —¿Te gustaría ir al cine conmigo Biu?

Empezaba a amar como sonaba ese apodo en sus labios. Me hacía sentir tan especial.

—Me encanataría Bible.

Cuando los mundos colisionan[BibleBuild]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora