No lo haría

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Bible

La hora del almuerzo había llegado y todavía no había visto a Build. Me extrañaba mucho, cuando llegue a casa le mande un mensaje como me había pedido, pero no respondió. 

Intenté llamarlo esta mañana, pero no había obtenido respuesta y me preocupaba no haberlo visto en ninguna clase. La única opción que me quedaba era averiguar con sus amigos. Me acerqué a Jeff que se encontraba sacando unos libros de su casillero.

—Hola Jeff — al principio me observo extrañado, pero luego me sonrió.

—Hola Bible, creo que es la primera vez que hablamos fuera de la clase ¿qué necesitas?

—¿Sabes algo de Build?

—Así que ustedes ya se conocen bien ¿eh? Imagino que tú eres la persona con la que iba a ir al cine ayer.

—Si.

—Tong y yo lo hemos estado llamando, pero no contesta ibamos a ir a su casa al salir de clases.

En ese momento su otro amigo llegó corriendo muy asustado.

—Build —comenzó a llorar y yo solo pensé lo peor.

—¿Qué le pasó a Build? —pregunté alzando las voz sin darme cuenta.

—Calmate Tong, respira —Jeff puso una mano en el hombro de Tong y lo ayudó a calmarse— ¿qué pasa con Build?

—Esta en el hospital, su madre acaba de llamarme.

Ninguno de los tres dijo una palabra más y salimos corriendo de la escuela. Nos montamos en el coche de Jeff y nos dirigimos al hospital.

Al llegar encontramos a los padres de Build hablando con un doctor, caminamos despacio para no interrumpir hasta que escuchamos a la madre de Build gritar.

—¿Mi hijo intentó suicidarse, eso es lo que me está diciendo? —la mujer comenzó a llorar y fue abrazada por su esposo mientras temblaba.

Nosotros tres dejamos de caminar. Sentí como si el suelo empezará a moverse y estuviera por tragarme.

—No estamos seguros de nada, por favor calmate. Cuando Build despierte sabremos lo que pasó —le dijo su esposo.

—Su hijo despertará dentro unas hora y podrán pasar a verlo.

—Gracias doctor.

Cuando el doctor se retiró, los padres de Biu se sentaron. Jeff y Tong se acercaron a ellos y yo solo me quedé en la distancia, tenía miedo de escuchar otra palabra.

La madre abrazo a Tong y a Jeff miesntras su esposo hacía una llamada.
Los minutos pasaban y Jeff me tomó de un brazo y me llevo a donde ellos estaban.

—Build estará bien, si te vas a quedar esperándolo al menos ven con nosotros.

Tong y la madre de Build ya había parado de llorar. La mujer me observo con curiosidad.

—¿Tú también eres amigo de Build?

—Sí, señora.

—No te había visto antes ¿eres el nuevo amigo con el que fue al cine? —Asentí, se notaba que hacía mucho esfuerzo para contener las lágrimas, aún así sonrió— Build se veía muy feliz cuando llegó ayer.

—Yo... —no supe que decir— ¿paso algo después de que él llegará a casa?

No quería lastimarla más, pero necesitaba saber que ocurrió.

—Nada, se veía raro al ver el muñeco que le mandaron, pero nada más. No entiendo como paso esto.

Quise preguntarle por el muñeco, sin embargo me contuve.

Su marido volvió y la convenció de comer algo, ambos se fueron a la cafetería. Nosotros no quedamos ahí en silencio mirando las manecillas del reloj moverse, hasta que Tong habló.

—Debí darme cuenta. Sabía que algo está mal, debí hacer algo. Debí hablar con él, no puedo creerme que halla hecho algo así y ...

—Él no lo haría—lo corté.

—¿Y tú como lo sabes? Desde cuando conoces tanto a Build —sonaba enojado, pero no me importaba.

—Solo lo sé. Estuve con él ayer, Biu no estaba bien, pero no pensaba hacer nada de eso.

—¡¿Crees qué lo conoces tanto?! ¿Quien rayos eres tú para empezar.

—Basta Tong, no estamos aquí para pelear por algo así, estamos aquí para apoyar a Build y ayudarlo como amigos que somos. Todos estamos preocupados, sin embargo el único que tiene las respuestas sobre qué paso es Build— hablo Jeff y calló a su amigo rubio.

Las horas pasaron y por fin una enfermera nos aviso que Biu había despertado.

Todos entramos a verlo, se veía algo perdido.

—Mamá —su madre lo abrazó y volvió a llorar. Ambos estaban llorado.

—¿Qué pasó Build?

—No fue mi intención que esto pasará solo las tome porque no podía dormir por las pesadillas, pero supongo que perdí la cuenta de cuantas tomé. De verdad lo lamento —habló entre gemidos.

Nadie en la habitación lucía convencido del todo con sus palabras, pero no dijeron nada.

Yo le creía. Algo en sus ojos en cuando me miró mientras se separaba de su madre me decía que era sincero. Aunque también me decía que estaba muy asustado.

Quise abrazarlo también. Decirle que contaba conmigo, que lo ayudaría, pero no quise agobiarlo.

Nos entendíamos con la mirada y eso era suficiente por ahora.

Cuando los mundos colisionan[BibleBuild]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora