PRÓLOGO

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Veo los papeles y documentos que tengo que firmar y revisar, resoplo aburrida y estresada con tanta mierda en mi escritorio, pero así son todos los días…claro unos mas divertidos que otros como por ejemplo: matar a mis enemigos, masacrar personas que no sirven y le hacen daño al mundo, perseguir al que intenta hacerme daño y bueno en fin matar a diestra y siniestra es una fascinación que tengo.

Aun recuerdo cuando mi padre me enseñaba desde casa, lo principal siempre fue que tuviera un alcance de inteligencia a un máximo nivel del cerebro, poder crear estrategias, sorpresas (y no las de cumpleaños), ataques, guerra…de todo y no me quejo la verdad siempre me atrapo la mafia, mi familia vive de eso, como hija mayor de los Fénix debía aprender todo, al final soy la única que lleva el negocio familiar, gracias a mi y todo lo que e hecho el apellido de mi familia esta donde debe estar.

Mi madre se rehusaba a que su primogénita entrara al mundo de sangre y armas aun sabiendo que ella esta casada con uno de los mafiosos mas poderosos del mundo me impedía seguir sus pasos…su excusa fue la de "no quiero que te conviertas en un monstruo, se que somos familia de uno pero eso no te da derecho a convertirte en eso, puedes elegir cariño", lastimosamente sus palabras no influenciaron tanto en mi, la adrenalina, el matar, el deseo corre por mis venas y no se puede detener.

Mi respuesta a eso fue " Amo lo que mi padre es y amo saber que seré igual o mejor que él".

Desde entonces mi madre dio por hecho que ya era un caso perdido, que ahora yo estaba en las manos de mi padre y eso significa peligro.

Han pasado los años y cada vez soy mejor y mas fuerte, mi papá se encargo muy bien de como guiarme al camino de la mafia, como se maneja la droga, los encargos, distribución, los procesos, como mantener todo sin que la ley se enterara o bien encontrara las pruebas para encerrarme.

Tengo todo limpio, y como todo mafioso es empresario yo no me quedo atrás, soy dueña de los mejores clubes y prostíbulos De New York y bien como sale dinero de ella, entra y sale toda mi droga.

El camino para mi no a sido fácil, e tenido que estar luchando contra el machismo de los hombres, ridículo, piensan que por ser mujer no podía llegar a ser una de las mafiosas mas respetadas a nivel mundial.

Estúpidos los que lo creían demostré ser perfecta, ambiciosa, asesina, luchadora, y valiente, nunca me deje caer por comentarios negativos, estoy donde estoy por méritos propios, por mis logros, no por tener el apellido mas temido que con orgullo porto.

Soy una mafiosa, sin esposo, sin compromisos, todo lo hago yo sola, ¿quien dijo que se necesita estar al lado de un hombres para gobernar el mundo o el poder? Si lo puedo hacer yo misma.

Dejo los papeles a un lado cuando la puerta es abierta.

Un hombre de metro setenta y ocho con un traje de camisa blanca salpicada con unas gotas de sangre y su saco y pantalón rojos llegando al tono vino, sus facciones son como las de un pequeño ángel, ojos azules, cabello azabache, su nariz respingada y su pecas notorias.

—¿A que debo el honor del llamado de la reina Fénix?—dice al mismo tiempo que hace una reverencia hacia mi.

Sonríe de lado, que cómico es, me levanto de mi asiento y camino en su dirección con lentitud.

—¿Te interrumpí en algo importante Lion?—pregunto con mi voz seria acercándome lo suficiente para tomar su corbata y jugar con ella.

—Uno que otro asunto mi reina—contesta acercándose a mis labios mientras sus manos viajan a mi cintura descubierta por mi top—¿me extrañaste amor?—susurra en mi oído mientras olfatea mi cabello.

Idiota

Sus manos van bajando hasta mi trasero el cual aprieta y me lleva contra él, me planta un beso brusco y siniestro como es él, mis manos viajan a su pecho mientras desabrocho su camisa.

Mi Mafia InterrumpidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora