Caminé detrás de la chica asiática, caminamos juntas hasta llegar al frente de una puerta , en la puerta había letrero color plata que tenía puesto Light.—¿Light?— pregunté con una de mis cejas alzadas.
— Acá por protocolo de seguridad, usamos apodos, hemos escogido este para ti, si no te gusta puedes cambiarlo. Es más que nada para mantener tu vida en privado.
—¿Que más da si tu ya sabes mi información? Aquel chico francés también lo sabe y anda a saber tú quien más — le respondí.— ¿Y en todo caso porqué Light?
—AAAH mon amour— Escuché, volteé y ahí estaba. Tan formal y sofisticado como siempre, se acercó a nosotras con sus manos en los bolsillos de su pantalón y en su cara estaba su característica sonrisa.— Estás un poco a la defensiva ¿No lo crees?— preguntó y yo volteé mis ojos.— Decidieron que fueras Light ya que aunque tu no lo sepas, tus poderes residen de la luz, estás conectada con ella, es por eso que puedes estar acá y al mismo tiempo en Australia si lo quisieras, probablemente puedas cegar a las personas con la luz. No sé si eso te hace sentido mon cheri.
— Bueno, podrás ver el interior de tu habitación luego— interrumpió Sage— y no te preocupes por tu información privada. Te aseguro que eso seguirá siendo privado.— Dijo y yo asentí.— Adiós Chamber, sígueme por acá querida.
Chamber se quedó mirando esperando a que yo le dijera algo, pero seguí mi camino detrás de Sage, quien me llevaba a quien sabe dónde.
Volvimos a parar en frente de otra puerta y ella la abrió con cuidado, me miró e hizo el gesto para que yo pasara primero. Una vez dentro y ella también, cerró la puerta.
—Bienvenida, Light— me saludó un señor bastante fornido y con la barba bien recortada.— Es un placer al fin conocerte.
— Hola— le saludé.— Bueno, me encargué de retrasarlo lo más que pude.— respondí.
— Si— dijo y carcajeó.— Fuiste bastante escurridiza, espero que pronto puedas cambiar tu perspectiva de nosotros. Te aseguro que no queremos hacer ningún daño, de hecho es al contrario.
— Algo me comentaron— dije.
— Bueno, puedes decirme Brimstone, a tu lado tienes a Sage, ya conociste a Chamber y pronto conocerás al resto de los agentes. Por favor toma asiento— me pidió amable. Hice caso y arrastré la silla que tenía enfrente y luego me senté.— Debido a que nunca tuviste una preparación militar, algunos de los agentes te entrenarán, entre ellos estarán Sage, Reyna, Chamber y Killjoy.— Comenzó a explicarme.— Aún no conoces a las chicas, pero te aseguro que te agradarán y sus enseñanzas te serán de bastante utilidad.
— ¿Se supone que todos ellos van a ayudarme a controlar mi poder?— pregunté.
— Sage y Reyna se encargarán de eso— respondió.— Chamber se encargará de enseñarte un par de cosas con las armas y bueno ya verás que tipo de cosas te enseñará Killjoy.
—¿Armas?— pregunté con una de mis cejas alzadas— Nunca me dijeron que debía de usar armas.
—Bueno, habrán veces que requerirás de ese tipo de conocimientos, no siempre , ya que no quisimos reclutarte para ese tipo de misiones.— respondió. Y yo asentí.— De todas formas es una manera de mantenerte segura a ti misma, ya verás que ganaras bastante enemigos que no te querrán con vida.
Un escalofrío recorrió mi espalda al imaginar que alguien pudiese odiarme tanto como para querer asesinarme.
—Mañana comenzará tu entrenamiento con Sage— dijo Brimstone.— Sé que estarás genial.— dijo sonriéndome con calidez. Por un momento sentí que era mi padre quien me decía esas palabras. Asentí y en silencio me levanté de ahí.
— Si me disculpan, me gustaría ir a mi habitación.— pedí. Brimstone asintió y yo salí dejando a ambos en la habitación.
Caminé por el mismo pasillo hasta llegar a la puerta con mi nuevo nombre. Suspiré mirando el letrero plateado. Entré en lo que sería mi habitación, era una réplica exacta de mi habitación en casa de mis padres, eso si había algo que desentonaba con la decoración.
—¿Que mierda haces aquí?— pregunté molesta— Déjame en paz.
— Has llegado— me sonrió.— ¿Ya te dieron las buenas noticias?— preguntó.— Seré tu entrenador en dos días más. Ya verás, aprenderás bastante.— respondió antes de que yo pudiera hacerlo. En su tono de voz se notaba que la idea le gustaba bastante.— Debo admitir que me hubiese gustado haber llegado acá junto a ti mon amour.— dijo acercándose a mi y yo de inmediato volteé mis ojos al escuchar su recurrente apodo.— pero al parecer te gusta bastante viajar.
—Basta de decirme así — le pedí.— ya te dije que tus coqueteos no significan nada para mi.— dije anejándome de él.— Y si, Brimstone ya me lo dijo.— dije y él sonrió.
— Debes de tener hambre, ven te llego a comer algo— dijo animado.
— No quiero— respondí.— Vete, quiero descansar.— pedí y me senté en la cama. El me observó por unos segundos y caminó hasta la puerta.— Ah y no vuelvas a entrar sin mi permiso.— le pedí, me recosté en la cama y le di la espalda, luego escuché como la puerta se abría y luego se cerraba.
Miré la pared que tenía enfrente y suspiré con tristeza. Extrañaba un montón a mis padres y encontraba increíblemente injusto tener que estar aquí pero todos ellos tenían razón, necesito ayuda con mis poderes, necesito saber usarlos y tampoco quiero arrastrar a mi familia en esto.
Después de varios minutos decidí levantarme y explorar un poco. Salí de mi habitación y comencé a caminar por los pasillos metálicos , volví a encontrarme con la oficina de Brimstone y seguí mi camino hasta que comencé a escuchar un bullicio de voces.
—¿Ha llegado la nueva?— preguntó una voz masculina.
— Eso es lo que pude oír — respondió una chica.
Me asomé y pude ver 4 personas ahí, un chico de tez morena, una chica de cabello blanco, otra de gafas y otra chica también de tez morena. Todos notaron mi presencia y voltearon al mismo tiempo.
—Hola— saludé intimidada.
—Aaah tu debes de ser Light, ¿No es así?— dijo la chica de lentes bastante sonriente mientras se acercaba a mi— Hallo, soy Killjoy, ella es Raze, por allá está Jett y Pheonix— dijo presentándomelos.
—Hola— Saludó la chica de cabello blanco.— Bienvenida — dijo sonriéndome.
—Gracias— le respondí con una sonrisa cerrada.
—Sientate con nosotros chica nueva— dijo Pheonix.— Estamos por comer.— Iba a negarme pero mi estómago rugió. Sonrojada me acerqué a ellos y me senté. Antes de que pudiese pestañear Jett había puesto un plato delante de mi. — Provecho— dijo el chico.
— Brimstone me ha dicho que tengo que enseñarte un par de cosas— dijo Killjoy.— Verás que te gustará.— dijo entusiasmada.
—Es espero— le respondí con una sonrisa.— Esto sabe delicioso.— Elogié.
—Gracias— respondió Jett.— Es comida tradicional de Corea.—Explicó.
—Y bueno, ¿eres más de explotar la situación?— preguntó Raze.— Si sabes a lo que me refiero— dijo mostrándome una de sus granadas. Abrí mis ojos sorprendida.
—Habemos gente que no necesitamos aparatitos— dijo Pheonix.— Apuesto a que Light puede hacer mucho más que tus bombitas.
—¿Bombitas?— preguntó ella con una de sus cejas alzadas.
—Ehm...la verdad es que no sabría responder— dije interrumpiéndolos.— Es por eso que he aceptado estar aquí.
—Creo que entiendo— Respondió Killjoy pensativa.— Pero no te preocupes, pronto andarás a nuestro ritmo.— dijo sonriente. Luego de eso la conversación fue bastante trivial y amena, al menos aquí había gente agradable.
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Amour (Chamber y tú)
FanfictionReclutada por sus poderes de radiante, Mariah Covey tendrá que aprender bastantes cosas dentro del protocolo valorant, entre ellas a defenderse en el campo de batalla, acompáñala en esta aventura en la cual se ve sumergida.